1. EL LUGAR DE LAS BODAS (Apocalipsis 19:7): Se llevará a cabo en el cielo, después del juicio de Babilonia.
2. EL ESPOSO (Apocalipsis 19:7b): El Mesías es llamado aquí el Cordero, debido a que él se entregó por nuestros pecados en el altar de los sacrificios (la cruz), ofreciendo al Padre su vida y sangre como pago de nuestra redención y justificación. En el AT cuando un judío pecaba, debía traer un animal al templo y poniendo sus manos en la cabeza del animal, confesaba su pecado. Luego el animal era sacrificado muriendo en lugar del pecador. Nosotros en forma simbólica, pusimos nuestras manos sobre su cuerpo, ya que él llevo todos nuestros pecados sobre su cuerpo (Isaías 53:6-7 / Juan 1:29).
3. LA ESPOSA (Apocalipsis 19:7c): En el AT se llama a Israel la esposa de Dios (cfr. Isaías 54:1-6 / 61:10 / Jeremías 2:2 / Ezequiel 16:1-3, 8 / Oseas 2:19 / 11:8-9), pero en el NT (Efesios 5:23-24) esta metáfora es transferida a la iglesia. ¿Por qué hoy se llama a la iglesia neo-testamentaría la esposa del Cordero y no a Israel? Primero tenemos que comprender, que antes de existir este período de gracia en el cual la iglesia-novia es preparada para las bodas del Cordero, Dios había llamado y bendecido a Abraham, para ser el padre de las naciones (Génesis 12:1-3). A través de él y sus descendientes, el Señor conformaría un pueblo santo y especial, para ser testigo y testimonio de su gloria (Deuteronomio 7:6-8). Sin embargo, por su desobediencia (Jeremías 31:31-32), Dios apartó de los israelitas su gracia por un poco de tiempo. Jesús “vino a lo que era suyo, pero los suyos no lo recibieron” (Juan 1:11) y por ende, las Bodas no se llevaron a cabo. Por eso podemos decir que todo esto fue permitido por el Señor para que los gentiles (las naciones no-judías) tuvieran la posibilidad de salvación (Isaías 54:7-8 / Romanos 11:25). Esta desobediencia convirtió a Israel en una mujer infiel en cuanto a su relación espiritual con el Omnipotente (Jeremías 3:6-13 7 Ezequiel 16:1-14, 15-30, 31-34, 35-43 / Oseas 3:1). Además esto se puede comprobar escrituralmente, dado que los profetas guiados por el Espíritu de Dios, la catalogaron como “ramera” por tener esta condición espiritual (Jeremías 2:19-22 / Isaías 1:21 / Ezequiel 16:41 / Oseas 2:2). De manera que ahora la Esposa del Señor es la iglesia (Efesios 5:22-32). Ella se ha desposado con Cristo (2º Corintios 11:2). Pero la iglesia, en su calidad de desposada del Mesías, debe ser limpia y santa, pero lamentablemente, estas dos cualidades faltan en la actualidad.
4. LOS LLAMADOS (Apocalipsis 19:9): Estos invitados denominados aquí los “llamados”, son todos los salvados después del rapto de la iglesia. La misma iglesia propiamente dicha, es decir, sus miembros en particular, no pueden ser esos “llamados”, porque no es necesario llamar a la Esposa, ya que sin su presencia no es posible celebrar las Bodas. Los ángeles serán los sirvientes en esas Bodas y ellos serán los anfitriones. “Ya ha llegado el día de las bodas del Cordero “es la manifestación final de la unión entre Cristo y su esposa. Así culminará su relación inicial, ligada a un compromiso, que era considerado como un contrato legal dentro de la cultura judía. Esto sigue a la llegada del Mesías, como el Novio en el Rapto de la iglesia antes de la Gran Tribulación, y precede a su regreso siete años más tarde para establecer el reino milenario.
5. LA PREPARACIÓN (Apocalipsis 19:7c): ¿Cuáles son los preparativos que tendrán lugar en el cielo? No los sabemos, pero lo que sí sabemos es que todo estará “preparado”, por cuanto así lo aseguró el mismo Rey (mateo 22:2-4). La preparación de la Esposa, consiste en el hecho de estar debidamente ataviada y embellecida (Jeremías 2:32 / Apocalipsis 21:2). Tanto la vestidura como la belleza de la Esposa, le serán entregadas por su Esposo (Ezequiel 16:10-14 / Apocalipsis 19:8). La vestidura representa la justicia de los santos (Apocalipsis 19:8), mientras que la belleza representa la pureza de los santos (1º Timoteo 2:9-10 / 1º Pedro 3.3-4). De esto se deduce claramente que la Esposa nada puede añadir por sí sola a éste atavío espiritual. Ella es demasiado pobre para vestirse adecuadamente para las Bodas del Hijo del Rey. Además, esto resultaría también imposible debido a que todas nuestras justicias son como “Todos somos como gente impura; todos nuestros actos de justicia son como trapos de inmundicia” (Isaías 64:6). ¿CÓMO PODEMOS ASISTIR A LAS BODAS VISTIENDO TRAPOS? Dice la Escritura, que las vestiduras de la Esposa deben de ser blancas y resplandecientes como el lino fino (Apocalipsis 3:5 7 19:8). El lino antiguamente, era un tejido muy costoso que vestían únicamente los reyes y los grandes. La iglesia pues, como Esposa del Cordero, que espera a su Marido a cada momento, debe estar vestida constantemente en esa justicia de los santos (2º Corintios 5:3), y debe proteger su vestidura de la impureza del pecado (Apocalipsis 16:15). Por eso no nos cabe duda alguna, de que las personas que aún continúan viviendo en sus pecados y no andan en la justicia, no pueden pertenecer a la iglesia del Mesías, aunque ella pertenezca en orden a todas las iglesias cristianas del mundo. Porque a cada iglesia uno puede unirse, pero a la del Señor no; por cuanto en todas las iglesias uno es recibido por los hombres, a los cuales es fácil engañar, pero en Su iglesia, el Señor personalmente recibe a sus miembros y a El no se lo puede engañar.
6. LAS BODAS (Apocalipsis 19:7): ¿PORQUE LAS SAGRADAS ESCRITURAS COMPARAN LA UNION PERMANENTE DEL MESIAS Y LA IGLESIA CON EL MATRIMONIO….? Porque el matrimonio es el que mejor ilustra esa unión. El mismo señor con frecuencia tomaba el matrimonio como ejemplo en sus enseñanzas (Mateo 9:15 / 22:1-14 / 25:1-13 / Marcos 2:19-20 / Lucas 5:34-35 / Juan 3:29). Esta Iglesia-Novia, a medida que pasaba el tiempo, fue teniendo muchos pretendientes que le fueron prometiendo su amor y su fidelidad. Y en este plan de conquista, el mundo le fue ofreciendo a la iglesia: riquezas, gloria, comodidad y confort. Y es por esta causa, que muchos de los llamados “cristianos” se fueron tras las ofertas del mundo, pervirtiendo así a la iglesia hasta que llegó a ser: “LA GRAN RAMERA”. Sin embargo, la Esposa verdadera rechazó todas las propuestas del mundo, permaneciendo fiel a su Esposo, el cual la pastorea en delicados pastos y el que indiscutiblemente, vendrá en su búsqueda. Las Bodas del Cordero es la unión del Mesías con su iglesia. La iglesia de los salvados y santificados con la muerte y la sangre de ese Cordero. La misma ceremonia y su contenido no son descriptas, pero sin duda que formarán parte en la ocasión, ya que ello es exigido para todas las bodas.
7. PARALELÍSMO PROFÉTICO ENTRE UNA BODA JUDÍA Y LA BODA DEL CORDERO: Encontramos un hermoso paralelismo profético entre una boda terrenal hebrea, y la Boda del Cordero anunciada para el tiempo final:
a) “EL PRIMER PASO, ES EL DEL COMPROMISO, y se refería a la redacción (condiciones) de las capitulaciones matrimoniales. Para efectuarlas, EL NOVIO DEBÍA DEJAR SU CASA PATERNA, Y VIAJAR A LA CASA DE LA NOVIA ESCOGIDA”: Vemos en la figura del Mesías, que él abandono su casa Paterna (el cielo), para venir a la casa de la Novia escogida (la tierra), a fin de redactar las condiciones para el matrimonio (Juan 1:1 / 1:14).
b) “YA EN LA CASA PATERNA, EL NOVIO PEDÍA AL PADRE LA MANA DE SU HIJA, y si éste estaba de acuerdo, convenían entre ambos en la DOTE A PAGAR (una costumbre que aún sigue vigente hasta el día de hoy)”: Jesús como Rey, vino a convenir la dote, el precio a pagar para tener derecho a la Novia-Iglesia amada (1º Corintios 6:20 / 7:23 / Hechos 20:28 / Hebreos 13:20 / Apocalipsis 1:5).
c) “Tan pronto como el NOVIO HABÍA PAGADO EL PRECIO ESTIPULADO, las capitulaciones estaban jurídicamente selladas, es decir: LAS CONDICIONES SE CONVERTÍNA EN LEGALES”: El Mesías Salvador, pagó el precio estipulado en el Calvario, y desde ese entonces, Él es nuestro dueño. La Iglesia-Novia ya le pertenece ante la justicia del Omnipotente (Romanos 5:8-9 / 8:30 / 1º Corintios 1:30).
d) “Luego de haberse SELLADO ESTAS CONDICIONES, los NOVIOS BEBÍAN UNA COPA DE VINO que simbolizaba la PROXIMA UNION CONYUGAL, y la mutua pertenencia”: Jesús selló con anticipación este compromiso mediante la “copa del Pacto”, cuando celebró el PESAJ (pascua judía) con sus discípulos, que coincidentemente también simboliza la liberación de la esclavitud y la pertenencia al libertador (Mateo 26:17-29 / 1º Corintios 11:23-26 / Éxodo 12:1-28).
e) “Si bien ERAN CONSIDERADOS COMO CASADOS, la vida en común NO COMENZABA TODAVÍA, El Esposo debía DESPEDIRSE Y RETORNAR A SU CASA donde debía PREPARAR LA NUEVA VIVIENDA CONYUGAL”: Jesús luego de su resurrección, volvió a su casa paterna (los cielos) para prepararnos –a los redimidos- la morada celestial (Hechos 1:11 / Juan 14:2-3).
f) “Cuando el PERÍODO FINALIZABA, el novio se preparaba para IR EN BUSCA DE SU ESPOSA. Ésta, NO CONOCÍA EL DÍA EXACTO, NI LA HORA, PUES ERA EL NOVIO QUIEN LO DETERMINABA”: El Mesías Jesús vendrá a buscar a su Novia-Iglesia en el momento menos esperado; ya que como Novia-Iglesia, no conocemos ni el día ni la hora que esto a de ocurrir (Mateo 24:36 / 1º Tesalonicenses 5:2 / Apocalipsis 16:15).
g) “Cuando llegaba el momento PREFIJADO POR EL ESPOSO, este llamaba a sus PATRINOS Y AMIGOS, quienes salían con antorchas en las manos para ir a buscar a la bienaventurada, cuando ya entraba la noche”: Jesús el Mesías, vendrá como “ladrón en la noche”, junto a sus ángeles, a buscar a la Iglesia-Novia que tanto ama (Mateo 24:43-44 / Lucas 12:39-40 / 1º Tesalonicenses 4:13-17).
h) “Este período de espera, llegaba al punto máximo de tensión. LA ESPOSA, HABÍA TRANSCURRIDO EL TIEMPO ESPERANDO ESTE GRAN MOMENTO, y en ese tiempo de espera, estuvo PREPERANDOSE PARA PRESENTARSE ADECUADAMENTE ANTE SU ESPOSO”: La Iglesia-Novia, debe prepararse durante este tiempo y mantenerse vigilante, ante el momento que se avecina. Solo así, podrá presentarse ante el Mesías sin avergonzarse (Lucas 21:36 / Marcos 13:33-34 / Mateo 24:42-47 / Juan 2:28).
i) “Los ESPECTADORES EN LAS CALLES COMPRENDÍAN ENSEGUIDA lo que estaba ocurriendo y gritaban: “¡¡¡AHÍ VIENE EL ESPOSO…!!!”. Este grito se comenzaba a pasar de boca en boca hasta que llegaba a la casa de la NOVIA, quien llamaba a sus doncellas para que LA AYUDASEN A VESTIR RÁPIDAMENTE, y para que la PERFUMEN CON LOS MEJORES UNGÜENTOS para estar agradable ante él”: En la parábola de las diez vírgenes, encontramos una expresión idéntica, respecto al Señor que viene a buscar a su Novia-Iglesia precisamente a la noche (Mateo 25:6-7).
j) “Cuando la NOVIA ESTABA PREPARÁNDOSE, el desfile con antorchas LLEGABA HASTA SU CASA, y todos quedaban AFUERA ESPERÁNDOLE”: El Señor y Esposo, en su misericordia, espera con paciencia a que su Iglesia-Novia se encuentre adecuadamente vestida, para llevarla a Su presencia (2º Pedro 3:9).
k) “A pesar del enorme deseo de un encuentro inmediato, el Esposo se MANTENÍA CALMO Y EXPECTANTE ESPERANDO LA SALIUDA DE LA NOVIA”: Así, a pesar del inmenso amor que el Señor siente por sus redimidos, y el deseo de estar con ellos a la brevedad, se mantiene expectante, esperando que la Iglesia-Novia se encuentre adecuadamente vestida (1º Tesalonicenses 4:7 / Hechos 20:32 / Levítico 20:7 / Josué 3:5 / Deuteronomio 7:6 / Salmo 50:5 / Hebreos 12:14).
l) “Cuando la Esposa ya estaba lista, salía de su casa junto a sus acompañantes, UN VELO CUBRÍA SU ROSTRO, para que NADIE DESCUBRIERA SU BELLEZA, SINO SOLO SU ESPOSO”: La Iglesia-Novia tiene un rostro especial para su Mesías, que está velado al conocimiento del mundo (1º Corintios 1:21, 27-29). Como también, este velo simboliza proféticamente, el instante del arrebatamiento: el mundo no lo conocerá (1º Corintios 15:52 / 1º Tesalonicenses 4:16-17).
m) “Cuando llegaban a la CASA PATERNA, donde se encontraba la NUEVA MORADA CONYUGAL, los invitados esperaban a los esposos. Después de darles la bienvenida, esto se retiraban al CUARTO NUPCIAL, donde concretaban la unión física sexual del matrimonio. Después, el Esposo VOLVIA SOLO AL SALÓN DE FIESTAS; donde las celebraciones continuaban por varios días, llegando a veces hasta una semana”: Al llegar a la casa paterna celestial, el Señor, Mesías y Rey, sellará la unión con los redimidos por medio del Juicio del Cordero o Tribunal de Cristo (Romanos 14:10 / 2º Corintios 5:10) y luego procederá a la entrega de coronas, conforme a las obras que hayamos realizado para el (Mateo 16:27 / Isaías 40:10-11 / Romanos 2:6 / Apocalipsis 22:12). Éste período, en el tiempo humano, coincide exactamente con la última semana del profeta Daniel (Daniel 9:27), lo que también es conocido como la “Gran Tribulación o Gobierno del Anticristo”.
n) “Durante este tiempo de festividades, EL ESPOSO NO MOSTRABA A SU ESPOSA, SI NO QUE LA OCULTABA HASTA EL FINAL DE LAS MISMAS; luego, sí era presentada a los amigos y familiares”: Podemos comprender aquí la simbología de esto, ya que se refiere al período de “gran tribulación”, donde la Iglesia-Novia estará oculta del mundo, en la presencia del Señor (1º Tesalonicenses 4:17). Luego del tiempo establecido, Él se presentará al mundo, seguido de sus ángeles y su Iglesia-Novia-Esposa (Apocalipsis 19:11-16 / 20:4-6). Es interesante notar que “los amigos del Novio-Esposo” quedan simbolizados perfectamente con los hijos del pueblo de Israel (Zacarías 12:10 / 13:6), quienes entrarán en el Milenio y verán a la Esposa-Novia glorificada (Zacarías 8:22-23).
8. EL RECORRIDO POST-BODAS (Apocalipsis 19:11-14) – LA LUNA DE MIEL: Después de las Bodas, el Mesías se dirigirá con la Iglesia a la tierra (1º Tesalonicenses 3:13). Simbólicamente, será esto algo así como un “viaje post-bodas” o “luna de miel” del Mesías con su Iglesia, el cual durará por espacio de mil (1.000) años. Después del reinado milenial sobre la tierra, el Mesías juntamente con la Iglesia y con todos los santos, volverán por un tiempo indefinido nuevamente al palacio del Padre, y durante ese tiempo la tierra será purificada por fuego y reedificada. O más bien aún, será creada una tierra completamente nueva. Entonces el Mesías, con la Iglesia y todos los santos, se radicarán en esa tierra (2º Pedro 3:13 / Apocalipsis 21:1-2, 9-10). “Lo siguen los ejércitos del cielo, montados en caballos blancos y vestidos de lino fino, blanco y limpio” (Apocalipsis 19:14) son los santos glorificados, descriptos en el versículo 8 utilizando similares símbolos de pureza.
9. LOS EFECTOS DE LAS BODAS (Efesios 5:31): La unión conyugal no sólo hace de dos un cuerpo, sino que cuando éste está sobre la base del amor, se convierte en un espíritu. Muchas veces, en la historia del mundo, existieron casos en que mediante la unión conyugal de familiares reales, naciones y pueblos entraba en unión. Mediante pues, el matrimonio simbólico del Mesías con la Iglesia, se unirán por lazos inseparables el cielo con la tierra (Isaías 66:22 / Apocalipsis 22:3-5(. Entre la nueva tierra y el nuevo cielo, no habrá más ese vacío que existe ahora. Habrá entonces unión libre, no sólo espiritual, sino también física. Los pueblos salvados vivirán permanentemente en la tierra nueva, pero tendrán también oportunidad de acceso al cielo (Apocalipsis 21:7).
10. ¿Por qué EL TESTIMONIO DE JESÚS ES EL ESPÍRITU DE LA PROFECÍA..? (Apocalipsis 19:10b): Existieron muchos profetas, que provenían de distintos círculos sociales, de diferentes niveles intelectuales y de distintos caracteres y talentos. Todos ellos escribían en condiciones diferentes y sobre temas totalmente diferentes. Separados por cientos de años uno de otros, de kilómetros y de edades. Pero a pesar de todo ello, en las Sagradas Escrituras (en las profecías) podemos ver una extraña unidad espiritual. Esto nos da la seguridad y nos confirma el hecho de que las Escrituras no son un invento de los hombres como muchos creen, sino que son la inspiración de Dios, y como base central de su tema tiene el testimonio del Mesías. Las Escrituras son el producto del Espíritu Santo, quien no solamente es “el Espíritu de verdad” (Juan 16:13), sino “el espíritu de la profecía” (Apocalipsis 19:10). El verbo “profetizar” (derivado de preposición griega “pro” y del verbo “phemi” –προφητεία - profeteía) significa: “Hablar, proferir ante, predicción…”. La preposición “ante” en este caso significa: 1º) “por adelantado” y/o 2º) “delante de”. Así que, “profetizar” es un término para describir la proclamación de la palabra de Dios de forma directa, osada o confrontando con ella a un grupo a o un individuo, a fin de decirle la verdad y comunicarle la voluntad de Dios. De manera que las Escrituras, en ambos sentidos, es palabra profética: “un libro que revela la voluntad de Dios y también sus planes y propósitos”. Este versículo define el testimonio del mismo Jesús, testimonio que está en el corazón, en el espíritu de la profecía. Estas palabras no solamente define a las Escrituras; sino que también definen el marco de todos los pronunciamientos y dichos que reclaman ser verdadera profecía: JESÚS EL MESÍAS (Yeshua ha Meshiaj) ocupa el lugar central en todo ello, como sucede con toda las Escrituras. Ya que el Antiguo Pacto existe para revelar al Mesías (Lucas 24:27 / Juan 5:39 / 1º Pedro 1:10-11); y el Espíritu Santo inspiró en NT con el mismo propósito (Juan 14:26 / 16:13-15).
Aclaro; Este texto no es un escrito originalmente mio, es copiado de otra pagina, sin embargo dado las riquezas de simbolismo he decidido copiarlo,pues se que sera de mucha bendición.
Se que son muchos los creyentes que no creen en el rapto, tampoco debato esta clase de temas, pues se que son cosas que provienen por revelación del PADRE,pero mi principal objetivo al pegar este texto es el que sirva de bendición a aquellos que creen en esta realidad bíblica.
CON RESPETO
PESAJ.
2. EL ESPOSO (Apocalipsis 19:7b): El Mesías es llamado aquí el Cordero, debido a que él se entregó por nuestros pecados en el altar de los sacrificios (la cruz), ofreciendo al Padre su vida y sangre como pago de nuestra redención y justificación. En el AT cuando un judío pecaba, debía traer un animal al templo y poniendo sus manos en la cabeza del animal, confesaba su pecado. Luego el animal era sacrificado muriendo en lugar del pecador. Nosotros en forma simbólica, pusimos nuestras manos sobre su cuerpo, ya que él llevo todos nuestros pecados sobre su cuerpo (Isaías 53:6-7 / Juan 1:29).
3. LA ESPOSA (Apocalipsis 19:7c): En el AT se llama a Israel la esposa de Dios (cfr. Isaías 54:1-6 / 61:10 / Jeremías 2:2 / Ezequiel 16:1-3, 8 / Oseas 2:19 / 11:8-9), pero en el NT (Efesios 5:23-24) esta metáfora es transferida a la iglesia. ¿Por qué hoy se llama a la iglesia neo-testamentaría la esposa del Cordero y no a Israel? Primero tenemos que comprender, que antes de existir este período de gracia en el cual la iglesia-novia es preparada para las bodas del Cordero, Dios había llamado y bendecido a Abraham, para ser el padre de las naciones (Génesis 12:1-3). A través de él y sus descendientes, el Señor conformaría un pueblo santo y especial, para ser testigo y testimonio de su gloria (Deuteronomio 7:6-8). Sin embargo, por su desobediencia (Jeremías 31:31-32), Dios apartó de los israelitas su gracia por un poco de tiempo. Jesús “vino a lo que era suyo, pero los suyos no lo recibieron” (Juan 1:11) y por ende, las Bodas no se llevaron a cabo. Por eso podemos decir que todo esto fue permitido por el Señor para que los gentiles (las naciones no-judías) tuvieran la posibilidad de salvación (Isaías 54:7-8 / Romanos 11:25). Esta desobediencia convirtió a Israel en una mujer infiel en cuanto a su relación espiritual con el Omnipotente (Jeremías 3:6-13 7 Ezequiel 16:1-14, 15-30, 31-34, 35-43 / Oseas 3:1). Además esto se puede comprobar escrituralmente, dado que los profetas guiados por el Espíritu de Dios, la catalogaron como “ramera” por tener esta condición espiritual (Jeremías 2:19-22 / Isaías 1:21 / Ezequiel 16:41 / Oseas 2:2). De manera que ahora la Esposa del Señor es la iglesia (Efesios 5:22-32). Ella se ha desposado con Cristo (2º Corintios 11:2). Pero la iglesia, en su calidad de desposada del Mesías, debe ser limpia y santa, pero lamentablemente, estas dos cualidades faltan en la actualidad.
4. LOS LLAMADOS (Apocalipsis 19:9): Estos invitados denominados aquí los “llamados”, son todos los salvados después del rapto de la iglesia. La misma iglesia propiamente dicha, es decir, sus miembros en particular, no pueden ser esos “llamados”, porque no es necesario llamar a la Esposa, ya que sin su presencia no es posible celebrar las Bodas. Los ángeles serán los sirvientes en esas Bodas y ellos serán los anfitriones. “Ya ha llegado el día de las bodas del Cordero “es la manifestación final de la unión entre Cristo y su esposa. Así culminará su relación inicial, ligada a un compromiso, que era considerado como un contrato legal dentro de la cultura judía. Esto sigue a la llegada del Mesías, como el Novio en el Rapto de la iglesia antes de la Gran Tribulación, y precede a su regreso siete años más tarde para establecer el reino milenario.
5. LA PREPARACIÓN (Apocalipsis 19:7c): ¿Cuáles son los preparativos que tendrán lugar en el cielo? No los sabemos, pero lo que sí sabemos es que todo estará “preparado”, por cuanto así lo aseguró el mismo Rey (mateo 22:2-4). La preparación de la Esposa, consiste en el hecho de estar debidamente ataviada y embellecida (Jeremías 2:32 / Apocalipsis 21:2). Tanto la vestidura como la belleza de la Esposa, le serán entregadas por su Esposo (Ezequiel 16:10-14 / Apocalipsis 19:8). La vestidura representa la justicia de los santos (Apocalipsis 19:8), mientras que la belleza representa la pureza de los santos (1º Timoteo 2:9-10 / 1º Pedro 3.3-4). De esto se deduce claramente que la Esposa nada puede añadir por sí sola a éste atavío espiritual. Ella es demasiado pobre para vestirse adecuadamente para las Bodas del Hijo del Rey. Además, esto resultaría también imposible debido a que todas nuestras justicias son como “Todos somos como gente impura; todos nuestros actos de justicia son como trapos de inmundicia” (Isaías 64:6). ¿CÓMO PODEMOS ASISTIR A LAS BODAS VISTIENDO TRAPOS? Dice la Escritura, que las vestiduras de la Esposa deben de ser blancas y resplandecientes como el lino fino (Apocalipsis 3:5 7 19:8). El lino antiguamente, era un tejido muy costoso que vestían únicamente los reyes y los grandes. La iglesia pues, como Esposa del Cordero, que espera a su Marido a cada momento, debe estar vestida constantemente en esa justicia de los santos (2º Corintios 5:3), y debe proteger su vestidura de la impureza del pecado (Apocalipsis 16:15). Por eso no nos cabe duda alguna, de que las personas que aún continúan viviendo en sus pecados y no andan en la justicia, no pueden pertenecer a la iglesia del Mesías, aunque ella pertenezca en orden a todas las iglesias cristianas del mundo. Porque a cada iglesia uno puede unirse, pero a la del Señor no; por cuanto en todas las iglesias uno es recibido por los hombres, a los cuales es fácil engañar, pero en Su iglesia, el Señor personalmente recibe a sus miembros y a El no se lo puede engañar.
6. LAS BODAS (Apocalipsis 19:7): ¿PORQUE LAS SAGRADAS ESCRITURAS COMPARAN LA UNION PERMANENTE DEL MESIAS Y LA IGLESIA CON EL MATRIMONIO….? Porque el matrimonio es el que mejor ilustra esa unión. El mismo señor con frecuencia tomaba el matrimonio como ejemplo en sus enseñanzas (Mateo 9:15 / 22:1-14 / 25:1-13 / Marcos 2:19-20 / Lucas 5:34-35 / Juan 3:29). Esta Iglesia-Novia, a medida que pasaba el tiempo, fue teniendo muchos pretendientes que le fueron prometiendo su amor y su fidelidad. Y en este plan de conquista, el mundo le fue ofreciendo a la iglesia: riquezas, gloria, comodidad y confort. Y es por esta causa, que muchos de los llamados “cristianos” se fueron tras las ofertas del mundo, pervirtiendo así a la iglesia hasta que llegó a ser: “LA GRAN RAMERA”. Sin embargo, la Esposa verdadera rechazó todas las propuestas del mundo, permaneciendo fiel a su Esposo, el cual la pastorea en delicados pastos y el que indiscutiblemente, vendrá en su búsqueda. Las Bodas del Cordero es la unión del Mesías con su iglesia. La iglesia de los salvados y santificados con la muerte y la sangre de ese Cordero. La misma ceremonia y su contenido no son descriptas, pero sin duda que formarán parte en la ocasión, ya que ello es exigido para todas las bodas.
7. PARALELÍSMO PROFÉTICO ENTRE UNA BODA JUDÍA Y LA BODA DEL CORDERO: Encontramos un hermoso paralelismo profético entre una boda terrenal hebrea, y la Boda del Cordero anunciada para el tiempo final:
a) “EL PRIMER PASO, ES EL DEL COMPROMISO, y se refería a la redacción (condiciones) de las capitulaciones matrimoniales. Para efectuarlas, EL NOVIO DEBÍA DEJAR SU CASA PATERNA, Y VIAJAR A LA CASA DE LA NOVIA ESCOGIDA”: Vemos en la figura del Mesías, que él abandono su casa Paterna (el cielo), para venir a la casa de la Novia escogida (la tierra), a fin de redactar las condiciones para el matrimonio (Juan 1:1 / 1:14).
b) “YA EN LA CASA PATERNA, EL NOVIO PEDÍA AL PADRE LA MANA DE SU HIJA, y si éste estaba de acuerdo, convenían entre ambos en la DOTE A PAGAR (una costumbre que aún sigue vigente hasta el día de hoy)”: Jesús como Rey, vino a convenir la dote, el precio a pagar para tener derecho a la Novia-Iglesia amada (1º Corintios 6:20 / 7:23 / Hechos 20:28 / Hebreos 13:20 / Apocalipsis 1:5).
c) “Tan pronto como el NOVIO HABÍA PAGADO EL PRECIO ESTIPULADO, las capitulaciones estaban jurídicamente selladas, es decir: LAS CONDICIONES SE CONVERTÍNA EN LEGALES”: El Mesías Salvador, pagó el precio estipulado en el Calvario, y desde ese entonces, Él es nuestro dueño. La Iglesia-Novia ya le pertenece ante la justicia del Omnipotente (Romanos 5:8-9 / 8:30 / 1º Corintios 1:30).
d) “Luego de haberse SELLADO ESTAS CONDICIONES, los NOVIOS BEBÍAN UNA COPA DE VINO que simbolizaba la PROXIMA UNION CONYUGAL, y la mutua pertenencia”: Jesús selló con anticipación este compromiso mediante la “copa del Pacto”, cuando celebró el PESAJ (pascua judía) con sus discípulos, que coincidentemente también simboliza la liberación de la esclavitud y la pertenencia al libertador (Mateo 26:17-29 / 1º Corintios 11:23-26 / Éxodo 12:1-28).
e) “Si bien ERAN CONSIDERADOS COMO CASADOS, la vida en común NO COMENZABA TODAVÍA, El Esposo debía DESPEDIRSE Y RETORNAR A SU CASA donde debía PREPARAR LA NUEVA VIVIENDA CONYUGAL”: Jesús luego de su resurrección, volvió a su casa paterna (los cielos) para prepararnos –a los redimidos- la morada celestial (Hechos 1:11 / Juan 14:2-3).
f) “Cuando el PERÍODO FINALIZABA, el novio se preparaba para IR EN BUSCA DE SU ESPOSA. Ésta, NO CONOCÍA EL DÍA EXACTO, NI LA HORA, PUES ERA EL NOVIO QUIEN LO DETERMINABA”: El Mesías Jesús vendrá a buscar a su Novia-Iglesia en el momento menos esperado; ya que como Novia-Iglesia, no conocemos ni el día ni la hora que esto a de ocurrir (Mateo 24:36 / 1º Tesalonicenses 5:2 / Apocalipsis 16:15).
g) “Cuando llegaba el momento PREFIJADO POR EL ESPOSO, este llamaba a sus PATRINOS Y AMIGOS, quienes salían con antorchas en las manos para ir a buscar a la bienaventurada, cuando ya entraba la noche”: Jesús el Mesías, vendrá como “ladrón en la noche”, junto a sus ángeles, a buscar a la Iglesia-Novia que tanto ama (Mateo 24:43-44 / Lucas 12:39-40 / 1º Tesalonicenses 4:13-17).
h) “Este período de espera, llegaba al punto máximo de tensión. LA ESPOSA, HABÍA TRANSCURRIDO EL TIEMPO ESPERANDO ESTE GRAN MOMENTO, y en ese tiempo de espera, estuvo PREPERANDOSE PARA PRESENTARSE ADECUADAMENTE ANTE SU ESPOSO”: La Iglesia-Novia, debe prepararse durante este tiempo y mantenerse vigilante, ante el momento que se avecina. Solo así, podrá presentarse ante el Mesías sin avergonzarse (Lucas 21:36 / Marcos 13:33-34 / Mateo 24:42-47 / Juan 2:28).
i) “Los ESPECTADORES EN LAS CALLES COMPRENDÍAN ENSEGUIDA lo que estaba ocurriendo y gritaban: “¡¡¡AHÍ VIENE EL ESPOSO…!!!”. Este grito se comenzaba a pasar de boca en boca hasta que llegaba a la casa de la NOVIA, quien llamaba a sus doncellas para que LA AYUDASEN A VESTIR RÁPIDAMENTE, y para que la PERFUMEN CON LOS MEJORES UNGÜENTOS para estar agradable ante él”: En la parábola de las diez vírgenes, encontramos una expresión idéntica, respecto al Señor que viene a buscar a su Novia-Iglesia precisamente a la noche (Mateo 25:6-7).
j) “Cuando la NOVIA ESTABA PREPARÁNDOSE, el desfile con antorchas LLEGABA HASTA SU CASA, y todos quedaban AFUERA ESPERÁNDOLE”: El Señor y Esposo, en su misericordia, espera con paciencia a que su Iglesia-Novia se encuentre adecuadamente vestida, para llevarla a Su presencia (2º Pedro 3:9).
k) “A pesar del enorme deseo de un encuentro inmediato, el Esposo se MANTENÍA CALMO Y EXPECTANTE ESPERANDO LA SALIUDA DE LA NOVIA”: Así, a pesar del inmenso amor que el Señor siente por sus redimidos, y el deseo de estar con ellos a la brevedad, se mantiene expectante, esperando que la Iglesia-Novia se encuentre adecuadamente vestida (1º Tesalonicenses 4:7 / Hechos 20:32 / Levítico 20:7 / Josué 3:5 / Deuteronomio 7:6 / Salmo 50:5 / Hebreos 12:14).
l) “Cuando la Esposa ya estaba lista, salía de su casa junto a sus acompañantes, UN VELO CUBRÍA SU ROSTRO, para que NADIE DESCUBRIERA SU BELLEZA, SINO SOLO SU ESPOSO”: La Iglesia-Novia tiene un rostro especial para su Mesías, que está velado al conocimiento del mundo (1º Corintios 1:21, 27-29). Como también, este velo simboliza proféticamente, el instante del arrebatamiento: el mundo no lo conocerá (1º Corintios 15:52 / 1º Tesalonicenses 4:16-17).
m) “Cuando llegaban a la CASA PATERNA, donde se encontraba la NUEVA MORADA CONYUGAL, los invitados esperaban a los esposos. Después de darles la bienvenida, esto se retiraban al CUARTO NUPCIAL, donde concretaban la unión física sexual del matrimonio. Después, el Esposo VOLVIA SOLO AL SALÓN DE FIESTAS; donde las celebraciones continuaban por varios días, llegando a veces hasta una semana”: Al llegar a la casa paterna celestial, el Señor, Mesías y Rey, sellará la unión con los redimidos por medio del Juicio del Cordero o Tribunal de Cristo (Romanos 14:10 / 2º Corintios 5:10) y luego procederá a la entrega de coronas, conforme a las obras que hayamos realizado para el (Mateo 16:27 / Isaías 40:10-11 / Romanos 2:6 / Apocalipsis 22:12). Éste período, en el tiempo humano, coincide exactamente con la última semana del profeta Daniel (Daniel 9:27), lo que también es conocido como la “Gran Tribulación o Gobierno del Anticristo”.
n) “Durante este tiempo de festividades, EL ESPOSO NO MOSTRABA A SU ESPOSA, SI NO QUE LA OCULTABA HASTA EL FINAL DE LAS MISMAS; luego, sí era presentada a los amigos y familiares”: Podemos comprender aquí la simbología de esto, ya que se refiere al período de “gran tribulación”, donde la Iglesia-Novia estará oculta del mundo, en la presencia del Señor (1º Tesalonicenses 4:17). Luego del tiempo establecido, Él se presentará al mundo, seguido de sus ángeles y su Iglesia-Novia-Esposa (Apocalipsis 19:11-16 / 20:4-6). Es interesante notar que “los amigos del Novio-Esposo” quedan simbolizados perfectamente con los hijos del pueblo de Israel (Zacarías 12:10 / 13:6), quienes entrarán en el Milenio y verán a la Esposa-Novia glorificada (Zacarías 8:22-23).
8. EL RECORRIDO POST-BODAS (Apocalipsis 19:11-14) – LA LUNA DE MIEL: Después de las Bodas, el Mesías se dirigirá con la Iglesia a la tierra (1º Tesalonicenses 3:13). Simbólicamente, será esto algo así como un “viaje post-bodas” o “luna de miel” del Mesías con su Iglesia, el cual durará por espacio de mil (1.000) años. Después del reinado milenial sobre la tierra, el Mesías juntamente con la Iglesia y con todos los santos, volverán por un tiempo indefinido nuevamente al palacio del Padre, y durante ese tiempo la tierra será purificada por fuego y reedificada. O más bien aún, será creada una tierra completamente nueva. Entonces el Mesías, con la Iglesia y todos los santos, se radicarán en esa tierra (2º Pedro 3:13 / Apocalipsis 21:1-2, 9-10). “Lo siguen los ejércitos del cielo, montados en caballos blancos y vestidos de lino fino, blanco y limpio” (Apocalipsis 19:14) son los santos glorificados, descriptos en el versículo 8 utilizando similares símbolos de pureza.
9. LOS EFECTOS DE LAS BODAS (Efesios 5:31): La unión conyugal no sólo hace de dos un cuerpo, sino que cuando éste está sobre la base del amor, se convierte en un espíritu. Muchas veces, en la historia del mundo, existieron casos en que mediante la unión conyugal de familiares reales, naciones y pueblos entraba en unión. Mediante pues, el matrimonio simbólico del Mesías con la Iglesia, se unirán por lazos inseparables el cielo con la tierra (Isaías 66:22 / Apocalipsis 22:3-5(. Entre la nueva tierra y el nuevo cielo, no habrá más ese vacío que existe ahora. Habrá entonces unión libre, no sólo espiritual, sino también física. Los pueblos salvados vivirán permanentemente en la tierra nueva, pero tendrán también oportunidad de acceso al cielo (Apocalipsis 21:7).
10. ¿Por qué EL TESTIMONIO DE JESÚS ES EL ESPÍRITU DE LA PROFECÍA..? (Apocalipsis 19:10b): Existieron muchos profetas, que provenían de distintos círculos sociales, de diferentes niveles intelectuales y de distintos caracteres y talentos. Todos ellos escribían en condiciones diferentes y sobre temas totalmente diferentes. Separados por cientos de años uno de otros, de kilómetros y de edades. Pero a pesar de todo ello, en las Sagradas Escrituras (en las profecías) podemos ver una extraña unidad espiritual. Esto nos da la seguridad y nos confirma el hecho de que las Escrituras no son un invento de los hombres como muchos creen, sino que son la inspiración de Dios, y como base central de su tema tiene el testimonio del Mesías. Las Escrituras son el producto del Espíritu Santo, quien no solamente es “el Espíritu de verdad” (Juan 16:13), sino “el espíritu de la profecía” (Apocalipsis 19:10). El verbo “profetizar” (derivado de preposición griega “pro” y del verbo “phemi” –προφητεία - profeteía) significa: “Hablar, proferir ante, predicción…”. La preposición “ante” en este caso significa: 1º) “por adelantado” y/o 2º) “delante de”. Así que, “profetizar” es un término para describir la proclamación de la palabra de Dios de forma directa, osada o confrontando con ella a un grupo a o un individuo, a fin de decirle la verdad y comunicarle la voluntad de Dios. De manera que las Escrituras, en ambos sentidos, es palabra profética: “un libro que revela la voluntad de Dios y también sus planes y propósitos”. Este versículo define el testimonio del mismo Jesús, testimonio que está en el corazón, en el espíritu de la profecía. Estas palabras no solamente define a las Escrituras; sino que también definen el marco de todos los pronunciamientos y dichos que reclaman ser verdadera profecía: JESÚS EL MESÍAS (Yeshua ha Meshiaj) ocupa el lugar central en todo ello, como sucede con toda las Escrituras. Ya que el Antiguo Pacto existe para revelar al Mesías (Lucas 24:27 / Juan 5:39 / 1º Pedro 1:10-11); y el Espíritu Santo inspiró en NT con el mismo propósito (Juan 14:26 / 16:13-15).
Aclaro; Este texto no es un escrito originalmente mio, es copiado de otra pagina, sin embargo dado las riquezas de simbolismo he decidido copiarlo,pues se que sera de mucha bendición.
Se que son muchos los creyentes que no creen en el rapto, tampoco debato esta clase de temas, pues se que son cosas que provienen por revelación del PADRE,pero mi principal objetivo al pegar este texto es el que sirva de bendición a aquellos que creen en esta realidad bíblica.
CON RESPETO
PESAJ.