Hablemos del pecado...

Re: Hablemos del pecado...

Igualmente bendiciones Cátara, gracias por su aporte. Me da la impresion que ud. piensa que una vez ya cristianos no pecamos, ¿le acierto?.

Es cierto, El nos purifica y perdona. Ni "con el jabón mas eficiente del mundo" podemos quitarnos el pecado, sólo con su poder.

GLORIA A DIOS, hermano. AMÉN.

Bueno, de nada sirven las "etiquetas"; el que OBRA GUIADO por el ESPÍRITU SANTO, NO PECA; pero, NO hay que CONFUNDIR; la LLAMADA, con el DON y LA OBRA del ESPÍRITU SANTO, que DIOS (Bendito sea) CONCEDE a todo el que EN ÉL CONFÍA y CUMPLE TODOS los MANDATOS de SUS ENSEÑANZAS.

Desde la LLAMADA hasta la CONCESIÓN; los APÓSTOLES pasaron por un PROCESO de PURIFICACIÓN y de APRENDIZAJE que duró más de tres años; aunque, durante ése PROCESO, NO todos DEJARON de PECAR....
Judas, NO solo NO se PURIFICÓ, sino que SIGUIÓ PECANDO; y, aunque NO se hubiera suicidado; NO hubiera podido RECIBIR el ESPÍRITU SANTO, al tiempo que los demás APÓSTOLES, tras la RESURRECCIÓN de nuestro SEÑOR JESUCRISTO; porque, UN solo PECADO lo IMPIDE.
Pero, el que PURIFICADO, LO RECIBE y OBRA GUIADO POR ÉL, NO PECA; porque EN ÉL y EN SU OBRA, NO HAY PECADO alguno, hermano. JESÚS ES EL EJEMPLO.

El PECADO, EVIDENCIA el DESCONOCIMIENTO del PECADOR....

El PROCESO es NECESARIO en TODOS; y, aunque MUCHOS "DICEN" OBRAR GUIADOS POR y CONFORME a ÉL; los FRUTOS NO ENGAÑAN.

JESÚS DICE: "Por SUS FRUTOS los CONOCERÉIS".

Que ÉL te Bendiga, hermano. AMÉN.
 
Re: Hablemos del pecado...

Estimados y estimadas foristas:<?xml:namespace prefix = o ns = "urn:schemas-microsoft-com:eek:ffice:eek:ffice" /><o:p></o:p>
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Me gustaría que hablemos de este tema (pecado) y para desarrollarlo pondré preguntas y citas referentes.<o:p></o:p>
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¿Qué es el pecado?, ¿Por qué es tan terrible pecar contra Dios? Ya que hay un castigo de por medio. ¿Porqué Dios detesta el pecado?.<o:p></o:p>
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Por cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios
(Romanos 3: 23)<o:p></o:p>
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Porque la paga del pecado es muerte, pero la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, Señor nuestro
(Romanos 6:23)<o:p></o:p>
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Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron
(Romano 5:12)<o:p></o:p>
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Esos, aunque conocen el juicio de Dios, que los que practican tales cosas son dignos de muerte, no solo las hacen, sino que también se complacen con los que practican (Romanos 1:32)<o:p></o:p>
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Pero por tu dureza y por tu corazón no arrepentido, atesoras para ti mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios, el cual pagará a cada uno conforme a sus obras
(Romanos 2:5-6)<o:p></o:p>
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Porque el aguijón de la muerte es el pecado, y el poder del pecado es la Ley
(1 corintios 15:56)<o:p></o:p>
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Saludos y gracias anticipadas por su participación.<o:p></o:p>

Pecado es errar en la marca. Eso literalmente significa la palabra pecado o pecar: errar.

Dios no quiere que erres porque quiere que te vaya bien.

Saludos.
 
Hablamos del pecado... ahora de la salvación

Hablamos del pecado... ahora de la salvación

Estimadas y estimados foristas:

Los seres humanos estamos condenados por causa del pecado... por eso necesita de una salvación.


  • Porque la paga del pecado es muerte, pero la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, Señor nuestro
    (Romanos 6:23)<?xml:namespace prefix = o ns = "urn:schemas-microsoft-com:eek:ffice:eek:ffice" /><o:p></o:p>

    <o:p></o:p>
  • Esos, aunque conocen el juicio de Dios, que los que practican tales cosas son dignos de muerte, no solo las hacen, sino que también se complacen con los que practican (Romanos 1:32)<o:p></o:p>
Ahora me gustaria girar el tema hablando de la salvación...

y como siempre, para ayudar a desarrollar el tema pregunto:

¿Cual es la manera por la cual Dios salva?


Y mis saludos.
 
Re: Hablemos del pecado...


El Pecado y Los pecados
Por el apóstol Nee to sheng​
La Biblia le presta mucha atención al asunto del pecado.
Podemos entender la salvación sólo cuando tenemos un entendimiento claro acerca del pecado.
Si queremos conocer el evangelio de Dios y la salvación de Dios, debemos conocer primero lo que es el pecado.
Debemos ver primeramente cómo el pecado nos ha afectado y cómo nos hemos hecho pecadores.
Sólo así entenderemos claramente la salvación de Dios.

Primero consideraremos el abecedario.
Debemos ver qué es el pecado, qué son los pecados y quién es un pecador.

LA DIFERENCIA ENTRE EL PECADO Y LOS PECADOS

Se puede ver fácilmente la diferencia entre el pecado y los pecados: el pecado está en singular y los pecados está en plural.
Sin embargo, debemos distinguir entre el pecado y los pecados.
Si usted no puede diferenciar a los dos, le será imposible entender su salvación.
Si alguien no entiende la diferencia entre el pecado y los pecados, aunque sea salvo, probablemente su salvación no tiene claridad.
¿Qué es el pecado según la Biblia? ¿Qué son los pecados?
Déjenme darles primero una breve definición.

El pecado se refiere al poder que está dentro de nosotros que nos motiva a cometer actos pecaminosos. En contraste, los pecados se refieren específicamente a los actos pecaminosos individuales que cometemos exteriormente
.

¿Qué es el pecado? No me gusta usar términos como “el pecado original”, “la raíz del pecado”, “la fuente del pecado”, o similares.
Estos términos fueron creados por teólogos y para nosotros son innecesarios. Seremos más simples y consideraremos este asunto según nuestra experiencia. Sabemos que en nosotros hay algo que nos motiva y nos fuerza a tener ciertas inclinaciones espontáneas; nos obliga a tomar el camino de la lujuria y la pasión. Según la Biblia esto es el pecado (Ro. 7:8, 16-17).
Pero no solamente existe tal pecado dentro de nosotros que nos fuerza y nos obliga, sino que también existen los actos pecaminosos individuales, los pecados, que se cometen exteriormente.
En la Biblia los pecados están relacionados con nuestra conducta, mientras que el pecado está relacionado con nuestra vida natural.
Los pecados son actos cometidos con las manos, los pies, el corazón y aun con todo el cuerpo.
Pablo se refiere a esto cuando habla de los hábitos de la carne (Ro. 8:13). Pero ¿qué es el pecado? El pecado es una ley que controla nuestros miembros (Ro. 7:23). En nuestro interior hay algo que nos obliga a pecar, a cometer el mal, y este algo es el pecado.
Si queremos diferenciar claramente entre el pecado y los pecados, hay una porción en las Escrituras que debemos considerar. Son los primeros ocho capítulos del libro de Romanos.
Estos ocho capítulos nos muestran el significado completo del pecado.
En estos ocho capítulos encontramos una característica sobresaliente: desde el capítulo uno hasta 5:11, solamente la palabra pecados se menciona; el pecado no se menciona. Pero desde 5:12 hasta el final del capítulo ocho, encontramos el pecado, y no los pecados.
Desde el capítulo uno hasta 5:11, Romanos nos muestra que el hombre ha cometido pecados ante Dios. Desde 5:12 en adelante, Romanos nos muestra qué clase de persona el hombre es ante Dios: él es un pecador.

El pecado se refiere a la vida que tenemos. Antes de Romanos 5:12, no hay mención de que lo muerto reaviva, pues el problema allí no es que uno necesita ser avivado, sino que los pecados individuales que se han cometido necesitan ser perdonados. Desde 5:12 en adelante, tenemos la segunda sección. Aquí vemos algo fuerte y poderoso en nuestro interior, que es una ley en nuestros miembros, el pecado, el cual nos obliga y arrastra a cometer actos pecaminosos, o sea, pecados. Por esto existe la necesidad de ser liberados.
Los pecados están relacionados con nuestra conducta.
Entonces, la Biblia nos muestra que necesitamos perdón por nuestros pecados (Mt. 26:28; Hch. 2:38; 10:43). Pero el pecado nos atrae y nos obliga a cometer actos pecaminosos.

Así que, la Biblia nos muestra que necesitamos ser liberados del pecado (Ro. 6:18,
22).

Una vez me encontré con un misionero que hablaba acerca del “perdón del pecado”. Inmediatamente me levanté para tomar su mano y le pregunté: “¿En qué parte de la Biblia dice ‘el perdón del pecado’?” El respondió que había muchas partes. Cuando le pregunté que si me podía encontrar una, él dijo: “¿Qué quiere usted decir? ¿No puede encontrar ni una parte que diga esto?” Yo le dije que en ninguna parte de la Biblia están mencionadas las palabras el perdón del pecado; sino que más bien, la Biblia siempre habla “del perdón de los pecados”. Los pecados son perdonados, no el pecado. El no creyó mis palabras, así que buscó en su Biblia. Finalmente me dijo: “Sr. Nee, es muy extraño. Cada vez que se usa esta frase, hay una ‘s’ agregada”. Creo que ustedes pueden ver que los pecados son perdonados, no el pecado.

Los pecados son exteriores. Por eso deben ser perdonados. Pero hay algo más en nosotros, algo fuerte y poderoso que nos obliga a cometer pecados. De esto no necesitamos perdón; de esto necesitamos ser liberados. Al instante en que ya no estemos bajo su poder y no tengamos nada que ver con esto, estaremos en paz.
La solución para los pecados viene por medio del perdón. Sin embargo, la solución al pecado viene cuando ya no estamos bajo su poder y no tenemos nada que ver con él. Los pecados tienen que ver con nuestras acciones y se cometen uno por uno. Esa es la razón por la cual necesitan ser perdonados.
Pero el pecado está dentro de nosotros, y nosotros necesitamos ser liberados de él.
Por lo tanto, la Biblia nunca dice “perdón de pecado” sino “perdón de pecados”.

La Biblia tampoco habla de ser “liberado de los pecados”. Yo le puedo asegurar que la Biblia no dice eso. Más bien la Biblia dice que somos “liberados del pecado”, no de los pecados. De lo único que necesitamos escapar y ser liberados es aquello que nos tienta y nos obliga a cometer pecados. Esta distinción está clara en la Biblia.
Yo puedo comparar los dos de la siguiente manera:


Según las Escrituras, se dice que el pecado está en la carne; mientras que los pecados están en nuestra conducta.
El pecado es un principio en nosotros; es un principio de la vida que tenemos. Los pecados son actos cometidos por nosotros; son actos en nuestro vivir.
El pecado es una ley en nuestros miembros. Los pecas son transgresiones que cometemos; son actividades y hechos reales.
El pecado es lo que somos; los pecados son lo que hacemos.
El pecado está en la esfera de nuestra vida; los pecados están en la esfera de la conciencia.
El pecado está relacionado con el poder de la vida que poseemos; los pecados están relacionados con el poder de la conciencia. Una persona es gobernada por el pecado en su vida natural, pero está condenada en su conciencia por los pecados cometidos exteriormente.
El pecado es considerado como una sola entidad; los pecados son considerados caso por caso.
El pecado está dentro del hombre; los pecados están ante Dios.
Del pecado debemos ser liberados; de los pecados debemos ser perdonados.
El pecado está relacionado a la santificación; los pecados están relacionados a la justificación.
En cuanto al pecado uno tiene que vencer; en cuanto a los pecados uno debe tener paz en el corazón.
El pecado está en la naturaleza del hombre; los pecados están en la conducta del hombre.
Figurativamente hablando, el pecado es como un árbol y los pecados son como el fruto del árbol.​

Podemos dejar claro este asunto con una simple ilustración. Al predicar el evangelio, a menudo comparamos al pecador con un deudor. Todos nos damos cuenta de que ser un deudor no es algo placentero. Pero debemos recordar que hay una gran diferencia entre el hombre que tenga deudas y el que tenga la disposición de incurrir en deudas. Una persona que pide prestado una y otra vez no le importa mucho usar el dinero de otro. La Biblia dice que los cristianos no deberían ser deudores (Ro. 13:8); no deberían pedir prestado de otros. Una persona predispuesta a pedir prestado puede llegar a pedir doscientos o trecientos dólares a alguien hoy, luego otros dos mil o tres mil dólares de algún otro mañana. Aun si él es incapaz de pagar sus deudas, y sus parientes o amigos tienen que pagar por él, después de unos días va a empezar a pensar en pedir prestado otra vez. Esto muestra que pedir prestado es una cosa, pero tener una disposición a pedir prestado es otra. Los pecados que la Biblia describe son como las deudas exteriores, mientras que el pecado es como el hábito y la disposición interiores; es como la mente inclinada a pedir prestado fácilmente. Una persona con tal mentalidad no se detendrá de pedir prestado sólo porque alguien haya pagado su deuda. Por el contrario, puede llegar a pedir más porque hay otros que pagan sus deudas.
Por esta razón Dios trata no sólo con el registro de pecados, sino también con la inclinación al pecado. Podemos ver que es importante tratar con los pecados, e igualmente importante es tratar con el pecado. Sólo cuando vemos ambos aspectos nuestro entendimiento acerca de la salvación está completo.
 
Re: Hablemos del pecado...

Es bueno diferenciar entre El Pecado y Los pecados ..
 
Re: Hablemos del pecado...

Shalom hermano Charles;
En cumplimiento a su solicitud, aquí estoy.

He leído todos los aportes, que a decir verdad, creo muy buenos, pero me ha llamado la atención que a su pregunta de "que es el pecado", nadie citara la definición que las escrituras sobre el pecado;

4Todo aquel que comete pecado, infringe también la Ley, pues el pecado es infracción de la Ley. (1ra de Juan 3:4)

Como bien se ha citado anteriormente, el pecado entró por un hombre al mundo; Adam. Sin embargo en ocaciones no reflexionamos en que a lo que se denomina pecado, no es mas que a la desobediencia a la Ley prescrita; "del arbol del conocimiento de lo bueno y de lo malo, NO debéis comer" (Parafraseado).

Esto implica, que pecado es desobediencia a la Ley dada al hombre, y creo que así de claro lo expone Juan en el texto antes citado.

Bendiciones.

David
 
Re: Hablemos del pecado...

La parte que te pongo en rojo me llama la atencion:

¿Como es posible que nosotros nos hagamos santos a nosotros mismos ?

Bendiciones Vayikra;

Aunque yo se que tu pregunta es retorica, abundaré en ella;

Veamos el contexto del pasaje que resaltaste en rojo;

14Como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia, 15sino, así como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir, 16porque escrito está: «Sed santos, porque yo soy santo».

Esto nos permite dicernir que la santidad esta sujeta a la obediencia, o dicho de otras maneras, la santidad depende de nuestra obediencia, y esa obediencia a la vez, está condicionada a nuestro libre albeldrio de querer o no obedecer.

Por lo tanto, en gran medida, depende de nosotros, sin quitar, claro está, la obra purificadora del sacrificio redentor de Nuestro Mesias, que nos capacita para ser Hijos obedientes.

Creo que en las Palabras de Pablo, se percibe una idea similar;

Así que, amados, puesto que tenemos tales promesas, limpiémonos de toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios. (2da a los Corintios 7:1)

Notemos que la exhortación de Pablo es a limpiarnos de contaminación, para gradualmente, ir alcanzando Santidad.

En estas otras Palabras, encontradas en la carta a los Hebreos, se visualiza la misma idea;

Seguid la paz con todos y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. (Hebreoas 12: 14)

Y Para culminar, nada mejor que las Palabras de Nuestro Moré (Maestro);

Santifícalos en tu verdad: tu palabra es verdad. (Juan 17:17)

Según esta hermosa declaración, el medio con el cual alcanzaremos santidad, es SU Palabra, y a ella debemos ir con espíritu apacible y humilde, deseando, en lo mas profundo de nuestro ser, hacernos obedientes a ella, guiados por el Espíritu con el que fuimos bautizados.

Un Abrazo en Yahshua a todos.

David
 
Re: Hablemos del pecado...

2Ped. 3:11 “Puesto que todas estas cosas así han de ser disueltas, ¡qué clase de personas deben ser ustedes en actos santos de conducta y hechos de devoción piadosa[!]”


Oiga pero que clase de Biblia rara tiene usted.Comprese una BIblia normal hombre
 
Re: Hablemos del pecado...

blafemar al espiritu santo....pecado imperdonable