Hay algunos extremos que son buenos, no es cierto (y es un extremo decirlo) que todos los extremos son malos. Debemos amar a Dios hasta el extremo, a ejemplo de Cristo; y debemos amar a nuestro prójimo hasta el extremo de dar la vida por él si es en salud de él, y nuevamente el extremo es Cristo. Cristo es un extremo en muchas cosas y nosotros le tenemos a él como el ejemplo extremo de lo que es un hombre perfecto. En esa dirección está la santidad, no en otra.
Pero este hilo no va de los extremos buenos, va de algunos extremos malos en ciertas doctrinas que hacen que los protestantes cometamos muchos errores que las más de las veces acaban por perjudicarnos.
Es paradójico lo que voy a decir, pero en mi opinión correcto, hay doctrinas buenas y ciertas que cuando se defienden (y pasa mucho en la apologética) hasta el extremo hacen que éstas se conviertan en mandamientos de hombres ridículos e incluso perjudiciales. Fíjense en la actitud de los judíos que cumplían la ley, al llevar al extremo el cumplimiento de algunas leyes consiguieron deshumanizarlas y que estas perdiesen todo su sentido: pues la ley es para el hombre. Así Jesús numerosas veces chocaba con los judíos, pero no os creáis que Jesús era un mal judío, fue siempre, toda su vida, un judío perfecto: el mejor de los judíos.
Vamos con algunas doctrinas que llevadas a su extremo pierden su sentido:
1. Una vez salvos, siempre salvos: Esta doctrina es cierta y verdadera. Si Dios nos salva nos salva de verdad, no nos salva ahora y mañana nos condena. Los nombres que están escritos en el libro de la vida están escritos allí para siempre. ¿Cuándo esta doctrina se vuelve contra nosotros?
Por experiencia propia he escuchado: !Confiesa que Jesús es tu salvador personal y ya eres salvo para siempre! ¿Magia? Luego cuando alguna persona que ha pasado por este nuevo rito se pierde y obra maldad en toda su vida dicen algunos: "Es que no era verdaderamente salvo" ¿En que quedamos?
Ser salvo es permanecer en Cristo, y permanecer no se hace un día, se hace siempre, cada día de nuestra vida. Recordemos lo que dice el mismo Cristo:
Jua 15:5 Yo soy la vid, vosotros los pámpanos: el que está en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque sin mí nada podéis hacer.
Jua 15:6 El que en mí no estuviere, será echado fuera como mal pámpano, y se secará; y los cogen, y los echan en el fuego, y arden.
Será echado fuera !Ajá! Hay quien ha estado en la vid, quien ha permanecido en Cristo y ha sido arrojado fuera: pues no llevaba fruto. Esa persona obviamente nuna fue declarada salva por Dios, pero ¿Quién de nosotros lo sabía? ¿Lo sabía el mismo? No. La seguridad en la salvación personal no salva a nadie. También estaban seguros aquellos que cuando....
Mat 7:21 No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos: mas el que hiciere la voluntad de mi Padre que está en los cielos.
Mat 7:22 Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre lanzamos demonios, y en tu nombre hicimos mucho milagros?
Mat 7:23 Y entonces les protestaré: Nunca os conocí; apartaos de mí, obradores de maldad.
La doctrina de salvo siempre salvo, cuando se confunde con "yo me siento salvo, luego estoy salvo". Yo he dicho: "Jesús es mi salvador, estoy salvo" es un extremo peligroso que puede llevarnos a distorsionar e ir en contra de las mismas palabras del Cristo Vivo.
2. Otra doctrina es la de la prosperidad, el que está en Dios prospera: CIERTO. ¿Pero cómo prospera? Prospera en paz, en felicidad auténtica, en amor de Dios... en lo que en verdad importa. Pero en lo que no importa que son honores, dinero, la salud de esta carne ahora, las relaciones de pareja, el poder... en estas cosas no necesariamente prospera según los criterios de este mundo. De hecho vez que promete Jesús:
Mat 10:22 Y seréis aborrecidos de todos por mi nombre; mas el que soportare hasta el fin, éste será salvo.
Pero este hilo no va de los extremos buenos, va de algunos extremos malos en ciertas doctrinas que hacen que los protestantes cometamos muchos errores que las más de las veces acaban por perjudicarnos.
Es paradójico lo que voy a decir, pero en mi opinión correcto, hay doctrinas buenas y ciertas que cuando se defienden (y pasa mucho en la apologética) hasta el extremo hacen que éstas se conviertan en mandamientos de hombres ridículos e incluso perjudiciales. Fíjense en la actitud de los judíos que cumplían la ley, al llevar al extremo el cumplimiento de algunas leyes consiguieron deshumanizarlas y que estas perdiesen todo su sentido: pues la ley es para el hombre. Así Jesús numerosas veces chocaba con los judíos, pero no os creáis que Jesús era un mal judío, fue siempre, toda su vida, un judío perfecto: el mejor de los judíos.
Vamos con algunas doctrinas que llevadas a su extremo pierden su sentido:
1. Una vez salvos, siempre salvos: Esta doctrina es cierta y verdadera. Si Dios nos salva nos salva de verdad, no nos salva ahora y mañana nos condena. Los nombres que están escritos en el libro de la vida están escritos allí para siempre. ¿Cuándo esta doctrina se vuelve contra nosotros?
Por experiencia propia he escuchado: !Confiesa que Jesús es tu salvador personal y ya eres salvo para siempre! ¿Magia? Luego cuando alguna persona que ha pasado por este nuevo rito se pierde y obra maldad en toda su vida dicen algunos: "Es que no era verdaderamente salvo" ¿En que quedamos?
Ser salvo es permanecer en Cristo, y permanecer no se hace un día, se hace siempre, cada día de nuestra vida. Recordemos lo que dice el mismo Cristo:
Jua 15:5 Yo soy la vid, vosotros los pámpanos: el que está en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque sin mí nada podéis hacer.
Jua 15:6 El que en mí no estuviere, será echado fuera como mal pámpano, y se secará; y los cogen, y los echan en el fuego, y arden.
Será echado fuera !Ajá! Hay quien ha estado en la vid, quien ha permanecido en Cristo y ha sido arrojado fuera: pues no llevaba fruto. Esa persona obviamente nuna fue declarada salva por Dios, pero ¿Quién de nosotros lo sabía? ¿Lo sabía el mismo? No. La seguridad en la salvación personal no salva a nadie. También estaban seguros aquellos que cuando....
Mat 7:21 No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos: mas el que hiciere la voluntad de mi Padre que está en los cielos.
Mat 7:22 Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre lanzamos demonios, y en tu nombre hicimos mucho milagros?
Mat 7:23 Y entonces les protestaré: Nunca os conocí; apartaos de mí, obradores de maldad.
La doctrina de salvo siempre salvo, cuando se confunde con "yo me siento salvo, luego estoy salvo". Yo he dicho: "Jesús es mi salvador, estoy salvo" es un extremo peligroso que puede llevarnos a distorsionar e ir en contra de las mismas palabras del Cristo Vivo.
2. Otra doctrina es la de la prosperidad, el que está en Dios prospera: CIERTO. ¿Pero cómo prospera? Prospera en paz, en felicidad auténtica, en amor de Dios... en lo que en verdad importa. Pero en lo que no importa que son honores, dinero, la salud de esta carne ahora, las relaciones de pareja, el poder... en estas cosas no necesariamente prospera según los criterios de este mundo. De hecho vez que promete Jesús:
Mat 10:22 Y seréis aborrecidos de todos por mi nombre; mas el que soportare hasta el fin, éste será salvo.