Re: Falsos profetas y falsos Cristos
Maestro EZEQUIEL ATAUCUSI GAMONAL. (El Cristo y el hijo del hombre para este tiempo)[/QUOTE]
¿Santo o Cachón?
Angel o diablo, congresista Noriega merece un trato imparcial.
Juan Ataucusi, uno de los 9 hijos del "maestro Ezequiel" sorprendió con sus denuncias a su "hermano" Javier Noriega, que han terminado involucrando a su padre. El hecho es que Juan había sido relegado al puesto 85 de la lista del Frepap por decisión del propio Ezequiel, que ubicó a Noriega a la cabeza. Los crímenes denunciados se cometieron supuesta-mente en 1991-92. Pero no se ha verificado la existencia de las víctimas.
Ezequiel Ataucusi en la clínica, después del interrogatorio policial en el que negó todas las acusaciones. Le diagnosticaron taquicardia. No se sabe si el fiscal involucrará tambien a Mario Paredes y Eusebio Vicuña, dirigentes del Frepap elegidos en 1992 y reelegidos en 1995 en la lista de Nueva Mayoría Cambio 90.
"Maestro, deschávese ¿a cuántos ordenó matar?", preguntó con sorna el mayor Javier Flores, integrante del grupo "Delta 3" de la Dirección contra el Terrorismo (Dincote) al jefe de la secta de los Israelitas del Nuevo Pacto Universal y dos veces candidato a la presidencia de la república, Ezequiel Ataucusi Gamonal.
"Señor, yo no he matado a nadie y mucho menos he ordenado matar", respondió Ataucusi muy serio, indignado por la falta de respeto del policía.
Místico Javier Noriega. Actualmente tiene la edad de Cristo en la cruz, 33 años.
El diálogo se produjo a las cuatro de la tarde del lunes 28, en una pausa del interrogatorio que se prolongó desde el mediodía, en que fue sacado de la clínica Maison de Santé, hasta la diez de la noche.
Ataucusi, acompañado de su abogado José Peláez Bardales, tuvo que responder unas 50 preguntas antes de volver a la clínica en ambulancia.
Mientras lo interrogaban, numerosos policías se asomaban a las oficinas. Querían conocer al exótico personaje convertido en el centro de la atención de la prensa nacional.
Ataucusi bebía una gaseosa y tostadas que le ofrecieron los policías.
Los presuntos asesinatos de una monja católica y varios disidentes de la secta no son los únicos cargos que se formulan contra Ataucusi. También se le acusa de tener vínculos con Sendero Luminoso y de haber dado refugio a Abimael Guzmán. También de narcotraficante y de administrar en la selva pistas de aterrizaje y pozos de maceración de droga.
Varias de las acusaciones están orientadas contra el congresista del Frepap y líder de la secta Javier Noriega Febres. Ataucusi ha sido involucrado por ser jefe del Movimiento.
¿CAIN ISRAELITA?
El que inició la campaña contra los Israelitas del Nuevo Pacto Universal es uno de los miembros de la secta, Juan Ataucusi, uno de los nueve hijos del santón del grupo religioso. Pero Juan, al parecer, no está solo, lo acompañan otros integrantes de ese movimiento.
Pero el hijo del jefe del movimiento no habría ido muy lejos en su denuncia a no ser por la cobertura que le brindó un canal de TV, que se hizo eco de las acusaciones y las amplificó. A partir de allí, el circo, siempre tan oportuno, prosperó en agosto.
Según versiones de miembros de la secta, Juan se ha sentido postergado por su padre, que lo relegó al puesto 85 de la lista de candidatos del Frepap, ubicando en el primer lugar a Javier Noriega.
Feligresa celebrando uno de los ritos sabatinos en el templo de Cieneguilla.
Noriega es notoriamente distinto al resto de los feligreses, por lo general gente humilde, con bajo nivel de instrucción y provinciana. El congresista proviene de la clase media limeña, estudió en el colegio La Salle y la Universidad Ricardo Palma, viste elegantemente y maneja el idioma con propiedad.
Eso, y la preferencia del patriarca, quizás haya generado resentimiento en algunos miembros de la secta que se han sumado a las acusaciones de Juan Ataucusi.
Ellos han denunciado que Noriega dio muerte a una monja católica, del Opus Dei, y que había planificado secuestrar a los hijos del presidente Alberto Fujimori y asesinar a Martha Chávez.
Muchos de los 50,000 fieles están desolados.
La verdad es que las acusaciones suenan un tanto disparatadas, porque algunos de esos siniestros planes se ubican en el año 1991, cuando -por ejemplo- a Martha Chávez no la conocía nadie, ni su esposo. Es difícil pensar que a alguien se le hubiera ocurrido secuestrarla.
Seguramente los Israelitas del Nuevo Pacto no son ángeles ni santos, pero no hay evidencias que practiquen ritos satánicos o que vayan por el mundo asesinando monjas y disidentes.
Es cierto que las sectas esotéricas han adquirido muy mala fama en el mundo en los últimos años. Shoko Asahara, líder de la secta Aum, rociaba gas sarín en el metro japonés. David Koresh -cabecilla de los davidianos- fue el responsable del holocausto de Waco, en Texas, para no remontar la historia al suicidio -o asesinato- de 900 personas en Guyana, en 1978, seguidoras de Jim Jones.
Estos antecedentes, y la extracción social de la mayoría de los seguidores de Ataucusi, los pueden convertir en presas fáciles de una prensa irresponsable y un gobierno dispuesto a entregar circo a falta de pan.
AL BORDE DEL ATAQUE
Al enterarse de las acusaciones que realizaba su propio hijo, Ezequiel Ataucusi sufrió un preinfarto. El anciano líder, de 78 años, padece también de diabetes y tenía programada una operación a la próstata antes de que empezaran los incidentes.
En la Maison de Santé los médicos le diagnosticaron "taquicardia acelerada" y le recomendaron reposo absoluto. Sin embargo, la presión de ciertos medios de prensa y la complacencia gubernamental pudieron más y fue llevado a la Dincote a pedido del fiscal Carlos Torres Caro.
Las escenas del anciano trasladado en una camilla, hicieron recordar a las de Mariano Ignacio Prado, ex magnate con el que se ensañó el gobierno del general Juan Velasco, movilizado acezante en su lecho de enfermo ante las cámaras y micrófonos de la TV.
LAS ARMAS
El propio fiscal Torres corroboró que las armas incautadas en Cieneguilla tienen licencia. Anteriormente, el 25 de abril de 1994, la Policía realizó una inspección en en la casa de Ataucusi. Certificó la existencia de una carabina Calico, otra Brno, dos Ruger, 5 revólveres Rossi, una pistola Star y otra Browning.
Interrogado por la Policía respecto a las armas, Ataucusi respondió que se las compró a un tal Jimmy Rossel, que todas tienen licencia y que las utilizaba para su defensa, pues había sufrido seis atentados contra su vida.
Resulta extraño que una organización religiosa como esa tenga varias armas y podría pensarse que no son tan pacíficos como parecen. Pero tampoco es cierta la existencia del supuesto arsenal con "armas de guerra" del que hablaron algunos medios.
El "maestro Ezequiel" en sus buenos tiempos. Antes lo acusaron de violación, pero resultó inocente.
Entre lecturas bíblicas y escenografía de Cecil B. de Mille, han encontrado atuendos que los hacen aparecer como palestinos de hace 2,000 años.
En un estudio realizado por el antropólogo Manuel Jesús Granados sobre el Movimiento Religioso de los Israelitas del Nuevo Pacto Universal, se habla de una tendencia a la violencia en la secta. En el capítulo sobre la moralización, se dice que ellos sustentan "que se aplique la pena de muerte según las ordenanzas establecidas en la Biblia. Así, comprenderían a los homicidas, ladrones, adúlteros, homosexuales, mentirosos, fornicadores, hechiceros e idólatras y a todo aquel que cometiera actos injustos y derramare sangre inocente. Todos estos aspectos están ampliamente sustentados, en forma bíblica en el libro escrito por Ezequiel Ataucusi, "Despertar de una nueva aurora". Y en casi la totalidad de sus documentos oficiales presentados a las autoridades del gobierno solicitan se restablezca la pena de muerte para que así se garantice el derecho a la vida humana y se pueda fortalecer la democracia."
No obstante, esas demandas no constituyen un delito. Es más, la pena de muerte ha sido incluida en la Constitución de 1993.
Se puede investigar mucho sobre la secta de los Israelitas. Pero no es justo condenarlos de antemano, como están haciendo ciertos medios y autoridades judiciales.(J.T.)
http://www.caretas.com.pe/1378/santo/santo.html
¿Santo o Cachón?
Angel o diablo, congresista Noriega merece un trato imparcial.
Juan Ataucusi, uno de los 9 hijos del "maestro Ezequiel" sorprendió con sus denuncias a su "hermano" Javier Noriega, que han terminado involucrando a su padre. El hecho es que Juan había sido relegado al puesto 85 de la lista del Frepap por decisión del propio Ezequiel, que ubicó a Noriega a la cabeza. Los crímenes denunciados se cometieron supuesta-mente en 1991-92. Pero no se ha verificado la existencia de las víctimas.
Ezequiel Ataucusi en la clínica, después del interrogatorio policial en el que negó todas las acusaciones. Le diagnosticaron taquicardia. No se sabe si el fiscal involucrará tambien a Mario Paredes y Eusebio Vicuña, dirigentes del Frepap elegidos en 1992 y reelegidos en 1995 en la lista de Nueva Mayoría Cambio 90.
"Maestro, deschávese ¿a cuántos ordenó matar?", preguntó con sorna el mayor Javier Flores, integrante del grupo "Delta 3" de la Dirección contra el Terrorismo (Dincote) al jefe de la secta de los Israelitas del Nuevo Pacto Universal y dos veces candidato a la presidencia de la república, Ezequiel Ataucusi Gamonal.
"Señor, yo no he matado a nadie y mucho menos he ordenado matar", respondió Ataucusi muy serio, indignado por la falta de respeto del policía.
Místico Javier Noriega. Actualmente tiene la edad de Cristo en la cruz, 33 años.
El diálogo se produjo a las cuatro de la tarde del lunes 28, en una pausa del interrogatorio que se prolongó desde el mediodía, en que fue sacado de la clínica Maison de Santé, hasta la diez de la noche.
Ataucusi, acompañado de su abogado José Peláez Bardales, tuvo que responder unas 50 preguntas antes de volver a la clínica en ambulancia.
Mientras lo interrogaban, numerosos policías se asomaban a las oficinas. Querían conocer al exótico personaje convertido en el centro de la atención de la prensa nacional.
Ataucusi bebía una gaseosa y tostadas que le ofrecieron los policías.
Los presuntos asesinatos de una monja católica y varios disidentes de la secta no son los únicos cargos que se formulan contra Ataucusi. También se le acusa de tener vínculos con Sendero Luminoso y de haber dado refugio a Abimael Guzmán. También de narcotraficante y de administrar en la selva pistas de aterrizaje y pozos de maceración de droga.
Varias de las acusaciones están orientadas contra el congresista del Frepap y líder de la secta Javier Noriega Febres. Ataucusi ha sido involucrado por ser jefe del Movimiento.
¿CAIN ISRAELITA?
El que inició la campaña contra los Israelitas del Nuevo Pacto Universal es uno de los miembros de la secta, Juan Ataucusi, uno de los nueve hijos del santón del grupo religioso. Pero Juan, al parecer, no está solo, lo acompañan otros integrantes de ese movimiento.
Pero el hijo del jefe del movimiento no habría ido muy lejos en su denuncia a no ser por la cobertura que le brindó un canal de TV, que se hizo eco de las acusaciones y las amplificó. A partir de allí, el circo, siempre tan oportuno, prosperó en agosto.
Según versiones de miembros de la secta, Juan se ha sentido postergado por su padre, que lo relegó al puesto 85 de la lista de candidatos del Frepap, ubicando en el primer lugar a Javier Noriega.
Feligresa celebrando uno de los ritos sabatinos en el templo de Cieneguilla.
Noriega es notoriamente distinto al resto de los feligreses, por lo general gente humilde, con bajo nivel de instrucción y provinciana. El congresista proviene de la clase media limeña, estudió en el colegio La Salle y la Universidad Ricardo Palma, viste elegantemente y maneja el idioma con propiedad.
Eso, y la preferencia del patriarca, quizás haya generado resentimiento en algunos miembros de la secta que se han sumado a las acusaciones de Juan Ataucusi.
Ellos han denunciado que Noriega dio muerte a una monja católica, del Opus Dei, y que había planificado secuestrar a los hijos del presidente Alberto Fujimori y asesinar a Martha Chávez.
Muchos de los 50,000 fieles están desolados.
La verdad es que las acusaciones suenan un tanto disparatadas, porque algunos de esos siniestros planes se ubican en el año 1991, cuando -por ejemplo- a Martha Chávez no la conocía nadie, ni su esposo. Es difícil pensar que a alguien se le hubiera ocurrido secuestrarla.
Seguramente los Israelitas del Nuevo Pacto no son ángeles ni santos, pero no hay evidencias que practiquen ritos satánicos o que vayan por el mundo asesinando monjas y disidentes.
Es cierto que las sectas esotéricas han adquirido muy mala fama en el mundo en los últimos años. Shoko Asahara, líder de la secta Aum, rociaba gas sarín en el metro japonés. David Koresh -cabecilla de los davidianos- fue el responsable del holocausto de Waco, en Texas, para no remontar la historia al suicidio -o asesinato- de 900 personas en Guyana, en 1978, seguidoras de Jim Jones.
Estos antecedentes, y la extracción social de la mayoría de los seguidores de Ataucusi, los pueden convertir en presas fáciles de una prensa irresponsable y un gobierno dispuesto a entregar circo a falta de pan.
AL BORDE DEL ATAQUE
Al enterarse de las acusaciones que realizaba su propio hijo, Ezequiel Ataucusi sufrió un preinfarto. El anciano líder, de 78 años, padece también de diabetes y tenía programada una operación a la próstata antes de que empezaran los incidentes.
En la Maison de Santé los médicos le diagnosticaron "taquicardia acelerada" y le recomendaron reposo absoluto. Sin embargo, la presión de ciertos medios de prensa y la complacencia gubernamental pudieron más y fue llevado a la Dincote a pedido del fiscal Carlos Torres Caro.
Las escenas del anciano trasladado en una camilla, hicieron recordar a las de Mariano Ignacio Prado, ex magnate con el que se ensañó el gobierno del general Juan Velasco, movilizado acezante en su lecho de enfermo ante las cámaras y micrófonos de la TV.
LAS ARMAS
El propio fiscal Torres corroboró que las armas incautadas en Cieneguilla tienen licencia. Anteriormente, el 25 de abril de 1994, la Policía realizó una inspección en en la casa de Ataucusi. Certificó la existencia de una carabina Calico, otra Brno, dos Ruger, 5 revólveres Rossi, una pistola Star y otra Browning.
Interrogado por la Policía respecto a las armas, Ataucusi respondió que se las compró a un tal Jimmy Rossel, que todas tienen licencia y que las utilizaba para su defensa, pues había sufrido seis atentados contra su vida.
Resulta extraño que una organización religiosa como esa tenga varias armas y podría pensarse que no son tan pacíficos como parecen. Pero tampoco es cierta la existencia del supuesto arsenal con "armas de guerra" del que hablaron algunos medios.
El "maestro Ezequiel" en sus buenos tiempos. Antes lo acusaron de violación, pero resultó inocente.
Entre lecturas bíblicas y escenografía de Cecil B. de Mille, han encontrado atuendos que los hacen aparecer como palestinos de hace 2,000 años.
En un estudio realizado por el antropólogo Manuel Jesús Granados sobre el Movimiento Religioso de los Israelitas del Nuevo Pacto Universal, se habla de una tendencia a la violencia en la secta. En el capítulo sobre la moralización, se dice que ellos sustentan "que se aplique la pena de muerte según las ordenanzas establecidas en la Biblia. Así, comprenderían a los homicidas, ladrones, adúlteros, homosexuales, mentirosos, fornicadores, hechiceros e idólatras y a todo aquel que cometiera actos injustos y derramare sangre inocente. Todos estos aspectos están ampliamente sustentados, en forma bíblica en el libro escrito por Ezequiel Ataucusi, "Despertar de una nueva aurora". Y en casi la totalidad de sus documentos oficiales presentados a las autoridades del gobierno solicitan se restablezca la pena de muerte para que así se garantice el derecho a la vida humana y se pueda fortalecer la democracia."
No obstante, esas demandas no constituyen un delito. Es más, la pena de muerte ha sido incluida en la Constitución de 1993.
Se puede investigar mucho sobre la secta de los Israelitas. Pero no es justo condenarlos de antemano, como están haciendo ciertos medios y autoridades judiciales.(J.T.)
http://www.caretas.com.pe/1378/santo/santo.html