Si analizas bien el reclamo que hacen estos hombres a Jesús en aquel día, éstos usan como argumentos a su favor lo siguiente:
"Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?"
Esto indica muy claramente, que según estos hombres por haber hecho tales señales, que también le fueron permitidas en los últimos tiempos al diablo y sus demonios, podían reclamar ujn lugar en el reino de los cielos. Más la verdad es que lo único que que abre el camino al Padre es el hijo, esa es la voluntad del Padre y si no se conoce al Hijo, aunque se le llame Señor, y tengamos a nuestro favor muchas obras maravillosas, no se estará haciendo la voluntad del Padre y por lo tanto ese Señor , Señor no es más que una muletilla, pues el que no conoce al hijo aunque le llame Señor, no conoce al Padre tampoco:
"Mas no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste." Juan 17
No solo es necesario permanecer en Cristo, Cristo debe también permanecer en nosotros. Muchos dicen estar en Cristo y le dicen Señor, más él no está en ellos:
"Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer." Juan 15.
Muchos permanecen en Cristo y hacen cosas en su nombre, más Cristo no permanece en ellos, por lo que sus obras no son la voluntad de Dios, sino sus propias obras, aunque Dios se manifieste en ellas en las obras a favor de los que sufren.
Dios le bendice!
Greivin.
