PADRE, QUE TODOS SEAN UNO

17 Enero 2010
275
0
Hola a todos:

Este tema se abre para que todos los que creemos en Jesús, podamos dialogar acerca de las coincidencias y diferencias que existen entre los cristianos, de una manera respetuosa se pretende que podamos exponer nuestros puntos de vista claramente y responder a los de otros

Es una realidad que el mundo cristiano está sumamente dividido, sin embargo, esta no es la voluntad de Jesús que dijo:

PADRE, QUE TODOS SEAN UNO.

Es por ello, deber de todos los que creen en Jesús estar al tanto de esto y buscar en lo posible, la reconciliación y la unidad. No se pretende cambiar el mundo en un día o desaparecer todas las diferencias asi como así, ni que cambiemos rotundamente lo que consideramos una verdad solo porque si. Pero para Dios, que es todopoderoso y que todo lo ve, aún los mas pequeños actos de humildad, caridad, paz y reconciliación de sus hijos, no le pasan desapercibidos y le son gratos.

Por lo anterior, hermanas y hermanos, los invito a que participen, dejando atrás las ofensas o discusiones que pudimos habernos hecho en otros temas. Los invito a que tratemos de llevar un dialogo sereno, respetuoso y humilde, en la libertad de los hijos de Dios.

Dios nos bendiga.
 
Re: PADRE, QUE TODOS SEAN UNO

Todos los cristianos nacidos de enuevo del agua y del Espíritu, por medio del nuevo pacto, seamos de origen gentil o judio y todos los judios del antiguo pacto tenemos una unión espiritual que es en Cristo Jesús; esta unidad que es espiritual e indivisible y es un hecho, conforma la iglesia o pueblo de Dios. Asi de simple y asi de complejo.

Saludos.
 
Re: PADRE, QUE TODOS SEAN UNO

Lo unico que se me ocurre responder es esto:
Jua 10:27 Mis ovejas escuchan mi voz; yo las conozco y ellas mi siguen

ese es el unico problema, supon que otro es un verdadero cristiano y yo no, nunca vamos a estar de acuerdo, ¿porque? porque el otro escucha la voz de Cristo y yo no, Sobre como vivir, sobre como hacer, sobre que creer, eso es lo que siempre nos divide, Unos pocos escuchan a Dios y los otros no, al final nunca podremos ponernos de acuerdo.

Podemos intentar ser democraticos, pero nunca vamos a llegar a un acuerdo, los que escuchan la voz de Cristo, oraran , clamaran por los que no lo hacen, pero nunca aceptaran sus terminos, porque siempre seguiran la voz de cristo.

lo ultimo que se me ocurre es:

Jua 5:43 Yo he venido en nombre de mi Padre, y no me recibís; si otro viene en su propio nombre, a ése le recibiréis.

ese es otro motivo del alejamiento, y de la separacion y la separacion de la separacion, Teniendo a cristo no lo reciben, ni oyen su voz, en cambio VIENE OTRO, y a ese si lo reciben, con su doctrina, con sus nuevas ideas, con sus nuevas revelaciones, aunque estas sean contrarias a la biblia o no esten en ella, igual, LA GENTE CUANDO NO OYE LA VOZ DE CRISTO no respeta nada.

Lamento ser pesimista pero creo que va a ser asi, no se puede llegar a un acuerdo, solo creo que los que de verdad siguen a Dios y por gracia son salvos, van a clamar y van a llorar muchisimo por los otros que no siguen a Dios, pero eso es lo unico que podran hacer.
 
Re: PADRE, QUE TODOS SEAN UNO

La salvación:

<!-- start content -->Salvación es un término que genéricamente se refiere a la liberación de un estado o condición indeseable..

Según el diccionario salvación significa: salvamento o salvamento y socorrismo, el término hace referencia a la salvación terrenal, salvación corporal o salvación del cuerpo; la ayuda física que permite la supervivencia y que es prestada a quien necesita ser salvado en situaciones de emergencia o riesgo. Se proporciona, bien por personas espontáneas, o bien por servicios profesionales (protección civil, servicios de búsqueda y rescate, bomberos, medicina de urgencias u otros servicios médicos o paramédicos).<SUP> </SUP>En muchas ocasiones está vinculado al voluntariado, y cuando las circunstancias del salvamento son tan arriesgadas que implican poner en riesgo a quien lo intenta, se suele calificar de heroísmo.

El concepto de salvación eterna, salvación celestial o salvación espiritual hace referencia a la salvación del alma, por la cual el alma se libraría de una amenaza eterna (castigo eterno o condenación eterna) que la esperaría tras la muerte. En teología el estudio de la salvación se llama soteriología y es un concepto vitalmente importante en varias religiones. El cristianismo acepta la salvación como la liberación de la esclavitud del pecado y de la condenación, a través de una nueva vida en Cristo "Regeneración", resultando en la vida eterna con Dios dentro de su Reino. La obra redentora de Cristo, a través de su sacrificio, reconciliándonos con Dios hace que se le denomine Salvador.

<SCRIPT type=text/javascript>//<![CDATA[if (window.showTocToggle) { var tocShowText = "mostrar"; var tocHideText = "ocultar"; showTocToggle(); } //]]></SCRIPT>Visión cristiana de la salvación

La salvación es uno de los conceptos espirituales más importantes en el cristianismo, junto con la divinidad de Jesucristo y la definición del Reino de Dios.

Tradicionalmente, entre los cristianos, una meta principal es obtener la salvación. Otros sostienen que la meta principal del cristianismo es cumplir la voluntad de Dios, aceptando su reinado, o que los dos conceptos son equivalentes. En muchas tradiciones, obtener la salvación es sinónimo de "ir al cielo" después de la muerte, mientras que muchos también enfatizan que la salvación representa un cambio de vida mientras se permanece en la tierra.

Varios elementos de la teología cristiana explican por qué la salvación se necesita y cómo se llega a obtener.

La idea de salvación se basa en que existe un estado de no-salvación, del cual el individuo (o la humanidad) necesita ser redimido. Para la mayoría de los cristianos católicos y protestantes, éste es el juicio de Dios sobre la humanidad debido a su culpa en el pecado original (debido al Lapso o "caída" de Adán) y a otros pecados actualmente cometidos por cada individuo o conjunto de individuos, ya que se reconoce pecado en todos.

Las iglesias ortodoxas rechazan el concepto agustiniano de pecado original, expresión que no existe ni en la Escritura ni en la patrística griega, y ven la salvación como una escala de mejoramiento espiritual y purificación de la naturaleza tanto humana como general, que fue dañada en la caída.

Una mayoría cristiana que está de acuerdo con que la humanidad fue creada libre de pecado, situación que en alguna forma resultó dañada, con la consecuente necesidad de que un Salvador restaure una correcta relación con Dios. Ese Salvador fue (y es) Jesús de Nazaret.

En la teología cristiana, hay tres conceptos de la posibilidad de salvación para los que no han oído el evangelio de Jesucristo. Uno es el exclusivismo. Está descrito en la Biblia y dice que hay solo un mediador entre el hombre y Dios, Jesucristo.

Uno es el pluralismo, que declara que toda religión es un camino hacia Dios, pero es diferente del universalismo en que no dice que todo feligrés de otras religiones será salvo.

La tercera es el inclusivismo. Esta doctrina declara que Dios puede hablar a todo corazón humano por medio del Espíritu Santo, y si una persona responde positivamente, será salva.
Catolicismo y Ortodoxia

Para la Iglesia Católica, la salvación no es sólo una liberación negativa del pecado (pecado original y pecado actual) y sus efectos: Dios salva no sólo de algo si no que por algo. La acción de Dios es una liberación positiva que eleva los seres humanos a un estado sobrenatural, a la vida eterna, en un plano espiritual superior a la vida terrenal, para unirse en un sólo cuerpo místico con Cristo, una de las tres Personas de la Trinidad, y acceder a la dignidad de hijos de Dios, para verle "tal como es" (1 Juan 3:2), en comunión de vida y amor con la Trinidad y todos los santos (Catecismo de la Iglesia Católica, 1023-1025, 1243, 1265-1270, 2009).


El católicismo y Cristianismo coinciden en el concepto básico de salvación de la siguiente forma: Los cristianos recibimos incluso en esta vida, por fe y de forma anticipada, bendiciones de la salvación que serán confirmadas total y definitivamente en la vida después de la muerte.

En este sentido, hay coincidencia entre Católicos y Cristianos al ver la salvación, incluso la del individuo, como algo útil y beneficioso en todo tiempo: pasado, presente y futuro, conceptos que, por supuesto, se aplican sólo al hombre: para Dios, pasado, presente y futuro son todos uno.
  • «Pero cuando se manifestó la bondad de Dios, nuestro Salvador, y su amor para con la humanidad, nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo, el cual derramó en nosotros abundantemente por Jesucristo, nuestro Salvador, para que, justificados por su gracia, llegáramos a ser herederos conforme a la esperanza de la vida eterna». (Tito 3:4-7).
  • El proceso de salvación continua dentro de la obra de Dios en aquellos que reciben el Evangelio. Pablo usa el tiempo presente en esta frase: «La palabra de la cruz es locura a los que se pierden; pero a los que se salvan, esto es, a nosotros, es poder de Dios» (I Corintios 1:18).
  • Sólo al completar la vida terrenal llegará la salvación a su estado final. No hay fórmula mágica ni experiencias emocionales que definitivamente impidan, a criaturas a las que Dios ha dado libre albedrío, de rechazar, alguna vez, la oferta de salvación. Incluso el apóstol Pablo consideró esta eventualidad para sí mismo, considerando que, después de haber predicado a otros, pudiera ser rechazado él mismo (I Corintios 9:27)
Protestantismo

En el cristianismo occidental la doctrina de la salvación, o soterología, involucra asuntos como la expiación, reconciliación, gracia, justificación, soberanía de Dios y el libre albedrío del ser humano. Varios conceptos distintos pueden ser encontrados en el catolicismo y el protestantismo. Dentro del protestantismo, esto se ve en la diferencia teológica entre el calvinismo y el arminianismo.

Entre los cristianos evangélicos, la salvación significa que todos han pecado y que se encuentran justamente bajo la condenación de Dios.

La expiación o reconciliación con Dios es posible para cualquiera, pero sólo a través de Jesucristo, quien vivió una vida perfecta y murió como un sacrificio de amor, en lugar de la muerte que merece toda la humanidad, mediante la confesión del pecado y la fe en Cristo como Señor y Salvador. La consecuencia de la salvación es que los pecados del pecador son perdonados y éste es nacido de nuevo como una nueva persona, un cristiano, un creyente, un hijo de Dios, y está sellado por el Espíritu Santo. Pero también se considera cierto que no todos los individuos obtienen salvación, porque no todos confiarán en Jesucristo.

Iglesias como las Iglesias de Cristo no sólo reconocen el escuchar el evangelio y responder con fe como parte del proceso de salvación, sino también el arrepentimiento, el bautismo y la obediencia continua, basándose en un fundamentalismo cristiano utilizando solamente la escritura como principio.

Un tercer punto de vista, el concepto de salvación universal, ha existido durante toda la historia del cristianismo y goza de creciente popularidad en Estados Unidos y otros países protestantes modernos, con el desarrollo del racionalismo y modernismo desde fines del siglo XVII.
Este punto de vista afirma que todos, independientemente de credo o religión, se salvarán e "irán al cielo", siendo éste el tema central del universalismo. En términos más coloquiales se dice a menudo que Dios "es demasiado amoroso como para condenar a nadie". Los cristianos tradicionales consideran este punto de vista una herejía porque implica que las religiones no-cristianas son igualmente válidas al cristianismo y que hay otros caminos a la salvación en reemplazo de la gracia de Cristo. Pero otras formas de universalismo cristiano aseguran que el cristianismo es la única religión completamente verdadera, y que la salvación universal sólo es accesible a través de Cristo: Cristo y su resurrección redimen a todos los que creen en Jesucristo y se arrepienten de sus pecados... Este es un concepto clave en el protestantismo liberal.
 
Re: PADRE, QUE TODOS SEAN UNO

La salvación:

<!-- start content -->Salvación es un término que genéricamente se refiere a la liberación de un estado o condición indeseable..

Según el diccionario salvación significa: salvamento o salvamento y socorrismo, el término hace referencia a la salvación terrenal, salvación corporal o salvación del cuerpo; la ayuda física que permite la supervivencia y que es prestada a quien necesita ser salvado en situaciones de emergencia o riesgo. Se proporciona, bien por personas espontáneas, o bien por servicios profesionales (protección civil, servicios de búsqueda y rescate, bomberos, medicina de urgencias u otros servicios médicos o paramédicos).<SUP></SUP>En muchas ocasiones está vinculado al voluntariado, y cuando las circunstancias del salvamento son tan arriesgadas que implican poner en riesgo a quien lo intenta, se suele calificar de heroísmo.

El concepto de salvación eterna, salvación celestial o salvación espiritual hace referencia a la salvación del alma, por la cual el alma se libraría de una amenazaeterna (castigo eterno o condenación eterna) que la esperaría tras la muerte. En teología el estudio de la salvación se llama soteriología y es un concepto vitalmente importante en varias religiones. El cristianismo acepta la salvación como la liberación de la esclavitud del pecado y de la condenación, a través de una nueva vida en Cristo "Regeneración", resultando en la vida eterna con Dios dentro de su Reino. La obra redentora de Cristo, a través de su sacrificio, reconciliándonos con Dios hace que se le denomine Salvador.

<SCRIPT type=text/javascript>//<![CDATA[if (window.showTocToggle) { var tocShowText = "mostrar"; var tocHideText = "ocultar"; showTocToggle(); } //]]></SCRIPT>Visión cristiana de la salvación

La salvación es uno de los conceptos espirituales más importantes en el cristianismo, junto con la divinidad de Jesucristo y la definición del Reino de Dios.

Tradicionalmente, entre los cristianos, una meta principal es obtener la salvación. Otros sostienen que la meta principal del cristianismo es cumplir la voluntad de Dios, aceptando su reinado, o que los dos conceptos son equivalentes. En muchas tradiciones, obtener la salvación es sinónimo de "ir al cielo" después de la muerte, mientras que muchos también enfatizan que la salvación representa un cambio de vida mientras se permanece en la tierra.

Varios elementos de la teología cristiana explican por qué la salvación se necesita y cómo se llega a obtener.

La idea de salvación se basa en que existe un estado de no-salvación, del cual el individuo (o la humanidad) necesita ser redimido. Para la mayoría de los cristianos católicos y protestantes, éste es el juicio de Dios sobre la humanidad debido a su culpa en el pecado original (debido al Lapso o "caída" de Adán) y a otros pecados actualmente cometidos por cada individuo o conjunto de individuos, ya que se reconoce pecado en todos.

Las iglesias ortodoxas rechazan el concepto agustiniano de pecado original, expresión que no existe ni en la Escritura ni en la patrística griega, y ven la salvación como una escala de mejoramiento espiritual y purificación de la naturaleza tanto humana como general, que fue dañada en la caída.

Una mayoría cristiana que está de acuerdo con que la humanidad fue creada libre de pecado, situación que en alguna forma resultó dañada, con la consecuente necesidad de que un Salvador restaure una correcta relación con Dios. Ese Salvador fue (y es) Jesús de Nazaret.

En la teología cristiana, hay tres conceptos de la posibilidad de salvación para los que no han oído el evangelio de Jesucristo. Uno es el exclusivismo. Está descrito en la Biblia y dice que hay solo un mediador entre el hombre y Dios, Jesucristo.

Uno es el pluralismo, que declara que toda religión es un camino hacia Dios, pero es diferente del universalismo en que no dice que todo feligrés de otras religiones será salvo.

La tercera es el inclusivismo. Esta doctrina declara que Dios puede hablar a todo corazón humano por medio del Espíritu Santo, y si una persona responde positivamente, será salva.
Catolicismo y Ortodoxia

Para la Iglesia Católica, la salvación no es sólo una liberación negativa del pecado (pecado original y pecado actual) y sus efectos: Dios salva no sólo de algo si no que por algo. La acción de Dios es una liberación positiva que eleva los seres humanos a un estado sobrenatural, a la vida eterna, en un plano espiritual superior a la vida terrenal, para unirse en un sólo cuerpo místico con Cristo, una de las tres Personas de la Trinidad, y acceder a la dignidad de hijos de Dios, para verle "tal como es" (1 Juan 3:2), en comunión de vida y amor con la Trinidad y todos los santos (Catecismo de la Iglesia Católica, 1023-1025, 1243, 1265-1270, 2009).


El católicismo y Cristianismo coinciden en el concepto básico de salvación de la siguiente forma: Los cristianos recibimos incluso en esta vida, por fe y de forma anticipada, bendiciones de la salvación que serán confirmadas total y definitivamente en la vida después de la muerte.


En este sentido, hay coincidencia entre Católicos y Cristianos al ver la salvación, incluso la del individuo, como algo útil y beneficioso en todo tiempo: pasado, presente y futuro, conceptos que, por supuesto, se aplican sólo al hombre: para Dios, pasado, presente y futuro son todos uno.
  • «Pero cuando se manifestó la bondad de Dios, nuestro Salvador, y su amor para con la humanidad, nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo, el cual derramó en nosotros abundantemente por Jesucristo, nuestro Salvador, para que, justificados por su gracia, llegáramos a ser herederos conforme a la esperanza de la vida eterna». (Tito 3:4-7).
  • El proceso de salvación continua dentro de la obra de Dios en aquellos que reciben el Evangelio. Pablo usa el tiempo presente en esta frase: «La palabra de la cruz es locura a los que se pierden; pero a los que se salvan, esto es, a nosotros, es poder de Dios» (I Corintios 1:18).
  • Sólo al completar la vida terrenal llegará la salvación a su estado final. No hay fórmula mágica ni experiencias emocionales que definitivamente impidan, a criaturas a las que Dios ha dado libre albedrío, de rechazar, alguna vez, la oferta de salvación. Incluso el apóstol Pablo consideró esta eventualidad para sí mismo, considerando que, después de haber predicado a otros, pudiera ser rechazado él mismo (I Corintios 9:27)
Protestantismo

En el cristianismo occidental la doctrina de la salvación, o soterología, involucra asuntos como la expiación, reconciliación, gracia, justificación, soberanía de Dios y el libre albedrío del ser humano. Varios conceptos distintos pueden ser encontrados en el catolicismo y el protestantismo. Dentro del protestantismo, esto se ve en la diferencia teológica entre el calvinismo y el arminianismo.

Entre los cristianos evangélicos, la salvación significa que todos han pecado y que se encuentran justamente bajo la condenación de Dios.

La expiación o reconciliación con Dios es posible para cualquiera, pero sólo a través de Jesucristo, quien vivió una vida perfecta y murió como un sacrificio de amor, en lugar de la muerte que merece toda la humanidad, mediante la confesión del pecado y la fe en Cristo como Señor y Salvador. La consecuencia de la salvación es que los pecados del pecador son perdonados y éste es nacido de nuevo como una nueva persona, un cristiano, un creyente, un hijo de Dios, y está sellado por el Espíritu Santo. Pero también se considera cierto que no todos los individuos obtienen salvación, porque no todos confiarán en Jesucristo.

Iglesias como las Iglesias de Cristo no sólo reconocen el escuchar el evangelio y responder con fe como parte del proceso de salvación, sino también el arrepentimiento, el bautismo y la obediencia continua, basándose en un fundamentalismo cristiano utilizando solamente la escritura como principio.

Un tercer punto de vista, el concepto de salvación universal, ha existido durante toda la historia del cristianismo y goza de creciente popularidad en Estados Unidos y otros países protestantes modernos, con el desarrollo del racionalismo y modernismo desde fines del siglo XVII.
Este punto de vista afirma que todos, independientemente de credo o religión, se salvarán e "irán al cielo", siendo éste el tema central del universalismo. En términos más coloquiales se dice a menudo que Dios "es demasiado amoroso como para condenar a nadie". Los cristianos tradicionales consideran este punto de vista una herejía porque implica que las religiones no-cristianas son igualmente válidas al cristianismo y que hay otros caminos a la salvación en reemplazo de la gracia de Cristo. Pero otras formas de universalismo cristiano aseguran que el cristianismo es la única religión completamente verdadera, y que la salvación universal sólo es accesible a través de Cristo: Cristo y su resurrección redimen a todos (Sin excepción), éste es un concepto clave en el protestantismo liberal.

Uf, lo siento, que me he equivocado al escribir la última idea. Lo pongo otra vez, corregido, dado que el concepto de arrepentimiento, visto como cambio de vida, corresponde al protestantismo y Cristianismo tradicional.
Lo que afirma el Universalismo o Cristianismo liberal es que Cristo y su resurrección redimen a todos (sin excepción).