El papel de los protestantes evangélicos en España

18 Noviembre 1998
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blogs.periodistadigital.com
Fuente: http://infocatolica.com/blog/coradcor.php/el-papel-de-los-protestantes-evangelicos

El papel de los protestantes evangélicos en España

Aunque su crecimiento no es comparable al que se da en la mayor parte de los países de Hispanoamérica, el número de protestantes evangélicos en España ha aumentado considerablemente en los últimos años. Y lo ha hecho tanto por la inmigración procedente de países donde una buena parte de la población ya es evangélica, como por las nuevas conversiones producidas en nuestro país. Históricamente el porcentaje de evangélicos en España ha sido muy pequeño (el más bajo de toda Europa Occidental), pero yo preveo que en una década este país contará con más de un 5% de evangélicos “practicantes". Quizás se acerquen al 10%. En esos números no tengo en cuenta a los residentes procedentes de países europeos de mayoría protestante, más que nada porque el nivel de práctica religiosa entre los mismos es ínfimo.

Estaremos hablando, pues, de una minoría bastante significativa que, por su forma de vivir su fe, causarán un impacto superior al que las meras cifras puedan aventurar. De hecho, cada vez son más los protestantes que han causado un impacto importante en la sociedad española. Ahí está el caso del padre de Mari Luz, la niña asesinada por un desalmado que debería de haber estado ingresado en la cárcel de no ser por la desastrosa situación de la administración de Justicia en España. Juan José Cortés, es pastor de la iglesia evangélica de Filadelfia, cuyos miembros son en su gran mayoría de etnia gitana. Su testimonio cristiano ha sido ejemplar.

Con todo, el protestante evangélico más conocido en nuestro país es, y seguirá siéndolo por bastante tiempo, César Vidal Manzanares. Ya lo era antes de ser el director de La Linterna en la Cadena Cope, pero sus cinco años al frente del segundo programa más importante de la cadena de los obispos ha conseguido que la mayoría de los españoles sepan quién es. No deja de ser curioso que haya tenido que ser una cadena católica la que haya encumbrado mediáticamente a un protestante, pero ya sabemos que los caminos del Señor son inescrutables. Y los de los obispos, no digamos.

César Vidal es un ejemplo claro de lo que el protestantismo español puede aportar a nuestra sociedad, sobre todo en un momento donde la cultura de la muerte está ganando la batalla en el Parlamento y en buena parte de los medios de comunicación. El protestante evangélico medio es pro-vida, defiende la institución familiar natural, se muestra contrario al adoctrinamiento totalitario de la EpC, etc. Y además suele ser bastante activo en la defensa de unos valores y una moral concorde a los evangelios. De hecho, aunque las diferencias entre protestantes evangélicos y católicos en muchas materias doctrinales son enormes e insalvables (y quien diga lo contrario no sabe de lo que habla), compartimos muchos de los valores que hacen que una sociedad pueda ser llamada civilizada. En ese sentido, lo que cabe esperar es que se produzca una colaboración sincera y fraterna entre católicos y protestantes a la hora de plantear un frente unido al común enemigo. Yo con César Vidal, a menos que él se convierta al catolicismo, no voy a estar nunca de acuerdo sobre los dogmas marianos o sobre la infalibilidad papal, pero siempre estaremos unidos en la defensa de la vida desde su concepción hasta su muerte natural. Y siempre plantaremos cara al lobby gay que busca pervertir hasta las conciencias de nuestros hijos. Y como César, muchos otros.

El problema es que junto con protestantes como César Vidal, Iñaki Colera, Juan Sánchez o Pablo Blanco, existen otro tipo de protestantes evangélicos que parecen más preocupados por tocarnos las narices, por no decir otra cosa, a los católicos y a nuestra Iglesia, que por cumplir el papel que deberían de desempeñar en este momento de la historia de España. Son aquellos que no pierden ocasión alguna para atacar al catolicismo en general y al catolicismo en particular. Venga o no venga a cuento. Es más, viendo la obsesión de algunos de ellos, uno se pregunta si esa gente es capaz de entender el cristianismo como algo más que un anti-catolicismo decimonónico. A veces da la impresión de que preferirían irse de juerga con el mismísimo Satanás antes que reconocer que comparten valores importantes con “Roma".

El protestantismo evangélico en España tiene que elegir cuál es el camino que quiere recorrer. Si el de los Juan José Cortés y César Vidal, que sin duda ayudarán no poco a que este país sea mejor, o el de los Xosé Manuel Suárez y José Antonio Monroy -el anticatolicismo de este último es patológico-, que son auténticas piedras de tropiezo para la sana convivencia entre católicos y protestantes. Conste que no les pido que escondan las diferencias que nos separan. A un protestante auténtico no le va a gustar nunca ni la religosidad popular católica, ni el sacramentalismo, ni el papel del Magisterio en la Iglesia Católica. Pero entre ser un Billy Graham o un Jack Chick hay una gran diferencia. La misma que distingue a los que son hermanos separados de los que son unos simples sectarios.

Luis Fernando Pérez Bustamante

PD: Se me dirá que también los católicos tenemos a nuestros Monroy y Suárez. No lo niego, pero se les nota mucho menos.


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Este post lo escribí al día siguiente de haber escrito este otro:

Fuente: http://infocatolica.com/blog/coradcor.php/acabaramos-zapatero-es-un-carca-tridenti

Acabáramos: Zapatero es un carca tridentino

Señoras y señores, sepan ustedes que el gobierno de Zapatero ha acabado en la intolerancia tridentina y asume “posiciones propias del catolicismo rancio, dogmático y contrarreformista". ¿No se han enterado? Repetimos: el Gobierno ha asumido y ejercido las conductas intolerantes del catolicismo más dogmático porque niega los derechos más fundamentales de la persona y “lo hace igual que Trento, en nombre de una mayoría".

No, no me he vuelto loco. No soy yo el que ha dicho semejante payasada provocadora. Lo ha dicho el vicepresidente de la Alianza Evangélica Española, a la sazón vicepresidente del Partido galeguista, médico de profesión. Este señor ha sido entrevistado por sus hermanos en la fe sobre la actualidad y la futura ley del aborto. Y claro, en vez de acudir al último siglo y medio de la izquierda para explicar la intolerancia del zapaterismo ante los que defienden la vida, este líder protestante español no ha tenido mejor idea que equipararle a la Iglesia Católica de Trento.

Pero ojo, va más allá y dice que en el Estado español (se ve que eso de ser galleguista le impide decir simplemente España) el anti-clericalismo es mayor que en cualquier otro país del norte de Europa. “La diferencia con los países de tradición protestante se encuentra en que en esos países siempre partieron de la clara separación iglesia-estado, el dominio de las dos esferas, como sucede en el calvinismo"…… Manda carallo, digo yo a eso. ¿Separación iglesia-estado en el calvinismo? ¿lo dice por la Ginebra de Calvino? ¿quizás por la Holanda calvinista que echó a patadas a los arminianos tras el sínodo de Dordrecht? ¿y qué decir del luteranismo y su maridaje con la política desde sus orígenes? ¿acaso ignora que la mayoría de los países europeos que hoy siguen siendo constitucionalmente confesionales son precisamente protestantes? ¿no es el luteranismo la religión de estado en Dinamarca? ¿no lo es en Noruega, en Finlandia y en Suecia? ¿acaso en esos países no es el estado el que financia por entero a sus iglesias nacionales? ¿y hace falta que le recuerde que la reina de Inglaterra -país al que nombra- es la cabeza de la Iglesia anglicana? ¿sabe quién ha sido durante siglos el que firmaba los nombramientos de los obispos anglicanos en el Reino Unido?

Sí, ya sé que en EEUU eso no es así. Que allá sí ha habido de siempre separación entre Iglesia y estado aunque, cosas que pasan, es el país occidental donde los cristianos más intervienen en la política de la nación, intentando “imponer” su moral en las leyes del país. Digo lo de “imponer” porque de eso son acusados por los que en ese país juegan respecto a ellos el papel que usted desempeña aquí respecto a los católicos.

Asegura este protestante gallego que “el déficit principal de la Iglesia católica actualmente es un déficit de carácter moral” porque “le cuesta demostrar que intenta convencer en lugar de imponer". Una evidencia de ello, según Suárez, es que muchos seguidores del catolicismo no reconocen la autoridad moral de su Iglesia y acaban apoyando posturas contrarias a la moral católica. Hombre, al menos sigue existiendo una moral católica a la que seguir o de la que desentenderse. En esos países europeos que he nombrado, buena parte del protestantismo ha enviado la moral cristiana al cubo de la basura. No hace falta que le recuerde lo que ocurre en el anglicanismo y el luteranismo, ¿verdad? Por no hablar del hecho de que la inmensa mayoría de los bautizados en esas confesiones protestantes no asoman por sus iglesias ni para ver si la carcoma se ha comido los bancos.

Dice Suárez que “los cristianos debemos hacernos oír en todos estos temas porque todos tienen fundamentos morales y deben hacer saltar en nosotros una manifestación pública". Oiga, pues yo juraría que eso es precisamente lo que intentamos hacer muchos católicos, obispos, sacerdotes y seglares. Los mismos que somos objeto de su desprecio estamos dando la cara para que usted, como médico, pueda objetar a la hora de hacer un aborto. Los que somos hijos de esa Iglesia a la que usted ataca sin venir a cuento, somos los que más nos estamos partiendo la crisma contra un gobierno de un espíritu totalitario no comparable al catolicismo, sino al totalitarismo de izquierdas de toda la vida. Usted, sin embargo, nos quiere meter a católicos y zapaterinos en el mismo saco. Usted sí que representa el verdadero espíritu de intolerancia del siglo XVI, en el que católicos y protestantes arreglaban sus diferencias en los campos de batalla y en las hogueras (sí, ustedes también quemaban gente, caballero). Usted, en vez de decir que “a pesar de nuestras grandes diferencias doctrinales, vamos del brazo de los católicos en la defensa de la vida", azuza un anticatolicismo bastardo que está instalado en los genes de los que son incapaces de entender que para ser un buen cristiano evangélico no hay que ser un estúpido anticatólico. Usted ataca a la sana convivencia entre católicos y protestantes en España. Usted, vicepresidente de la Alianza Evangélica Española, es una mancha para el cristianismo de este país. Usted se merece el mayor de mis desprecios.

Luis Fernando Pérez Bustamante

PD: Ya que al vicepresidente de la AEE le da “yu-yu” decir España, propongo que a partir de ahora pasen a llamarse AEEE: Alianza Evangélica del Estado Español.
 
Re: El papel de los protestantes evangélicos en España

Parece que LFPB tiene enormes fallos de "memoria". Claro que también puede ser que le convengan estos fallos.

Dinos, prócer de los buenos entendimientos: ¿Donde estuvo esta búsqueda de los que nos une durante tu añorado nacional catolicismo? (No voy a repetir una vez más lo que he narrado hasta la saciedad)

En cuanto a Cesar Vidal, ¿cual es su epílogo en la famosa (y en demasiadas ocasiones triste) COPE?

También has citado a Inglaterra ha pero ignoras lo que ocurrió con la Carta Magna y los 27 caballeros que osaron enfrentarse con el más poderoso de todos los papas, Inocencio III. Su Carta Magna es la Madre de todas las Constituciones.
Jamas algo por el estilo nos ha llegado desde la Roma papal.

Ahora nos pides colaboración y ¿para que? Esta claro para seguir venciendo puesto que no podéis convencer. ¿Y a quien no podéis convencer? Pues ni más ni menos que a vuestros bautizados. Son vuestros bautizados y no los nuestros quienes enfrentan a su propia Jerarquía.

También tu feroz crítica a quien ha tildado a Zapatero de tridentino. ¿Podría serlo de no haber existido Trento?