Re: Libre Albedrío/Los humanos como titeres de Dios
Este es mi primera publicacion y, ciertamente, creo que a mi este tema es uno de los que mas me conflictuan.
Muchos familiares me han comentado de que la vida, en la que vivimos, es una paradoja: (1) Dios no creo con libre albedrio, o sea capaz de poder tomar decisiones y eleqir el camino que quisieramos llevar, definir metas. Pues Dios, al crearnos con su imagen y semejanza, nos concedio independencia de razon y accion, pues a Dios mismo nadie lo controla y, mediante esto, podemos deicr que tenemos libre albedrio;
Estoy de acuerdo contigo en este punto, pues el hombre ESCOGE el camino que quiere para él y su descendencia.
(2) Dios es omnisapiente, por lo tanto Dios lo sabe TODO: Conoce el pasado, presente y futuro. Sabe que es lo que quiere hacer con la humanidad, porque su voluntad se ejerce sobre todas las cosas: "Ni siquiera una sola hoja de arbol cae si no es por la voluntad de Dios".
Si es omnisciente, es obvio.
Si Dios sabe todo, mas en este punto en el que se dice que Dios conoce el futuro, el presente y el pasado, es el que pone a las personas a imaginaciones como la predestinación. En el que Dios ya sabe quién el día de mañana robara, quién cometerá adulterio o asesinato, o quien se volverá un santo.
Dios más bien no tiene tiempo ni espacio, el tiempo de Dios no existe, y el tiempo de los hombres no se ajusta a Dios.
Dios tiene voluntad sobre cada individuo, no tiene a priori excluidos ni escogidos. La mayoría de los dictámenes de la salvación divina fueron hechos por el hombre y a estas alturas hay muchos religiosos o no que no cumplen con obedecer a Dios, y estar metido en ninguna religión ni cumpliendo con doctrinas y teologías salvara a ningún individuo. Dios ya mostró lo que quería de nosotros. "Debe usted descubrirlo". Continue leyendo...
A partir del punto número dos, es cuando comenienza el conflicto. Por que ¿De qué me sirve mi libre albedrio? ¿De verdad existe el libre albedrio o es algo que nos han hecho crees a traves del tiempo?
Ademas, de que la onisapiencia de Dios es limitada de cierta manera: Por que Dios no puede tener pensamientos de maldad, puesto a que ÉL es la bondad y el amor absoluto. Así que, creo yo, que Dios no conoce ni determina los procesos en los que nos movemos, por que seria estupido decir que Dios sabe que vamos a pecar y, en parte, contradictorio: Por que entonces Dios debio de haber predeterminado que la humanidad iba a vivir en pecado. Amigos, ¿Qué piensan? Y, espero, esto este entendible y bien redactado. Amigos, ¿Qué piensan? Y, espero, esto este entendible y bien redactado?
El libre albedrío es la capacidad humana de decidir entre el bien y el mal. La libertad de elección es la decisión independiente y voluntaria para actuar acorde a lo bueno, o en su contra.
El camino del bien Dios los ha proporcionado en su Escritura. Lea con atención:
"Mira, pues; yo pongo hoy delante de vosotros la bendición y la maldición: la bendición, si obedecéis los mandamientos del Señor vuestro Dios que yo os mando hoy; y la maldición, si no obedecéis los mandamientos del Señor vuestro Dios, sino que os apartáis del camino que yo os mando hoy, para ir en pos de dioses ajenos que no habéis conocido." (Deuteronomio 11:26-28).
Para mi este punto significa "¿Quieren la bendición, el bien? Entonces cumplan con los mandamientos.
¿Buscan la maldición?
Entonces desconozcan los preceptos y vivan según antojan. Anden por sus caminos, y no por los de Yavéh nuestro Señor. Eso es lo malo."
Ahora el que no tiene las opciones reales, según las Escrituras y esta tras las doctrinas, las teologías y filosifias humanas, y la religiosidad de instituciones que se creen Dios en esta tierra, no tienen las opciones reales para escoger porque la desconocen.
El pasaje: "he puesto delante de vosotros la vida y la muerte, la bendición y la maldición. Escoge, pues, la vida" (Deuteronomio 30:19), tiene como objetivo enseñarnos que el libre albedrío trata acerca de elegir entre la vida y la muerte, y no entre el bien y el mal.
Lea con atención: “Llamo hoy por testigos contra vosotros a los cielos y a la tierra, de que he puesto delante de vosotros la vida y la muerte, la bendición y la maldición. Escoge, pues, la vida para que vivas, tú y tus descendientes, amando al Señor tu Dios, escuchando Su voz y siéndoLe fiel. Porque Él es tu vida y la prolongación de tus días..."
(Deuteronomio 30:19-20)
Llamo hoy por testigos contra vosotros a los cielos y a la tierra: así como Dios creó al comienzo de la Creación los cielos y la tierra, también Él estipuló desde ese momento lo que considera bueno y lo que es malo. Y, así como cielos y tierra permanecen y no varían antojadizamente, las leyes el Eterno son invariables, precisas.
de que he puesto delante de vosotros: Dios permite que escojamos, es Él que nos pone en situación de poder optar. Y toda elección, para ser considerada como tal, necesariamente debe ser tomada libremente y voluntariamente; de lo contrario, ¡no es una elección!
Así pues, elegir es estar desarrollando lo potencial que Dios nos entrega.
la vida y la muerte, la bendición y la maldición: la Biblia utiliza un recurso estilístico habitual, la reiteración de un concepto utilizando expresiones sinónimas, o semejantes. Vida es bendición, es lo que representa el bien; muerte es maldición, lo que representa el mal.
¿De dónde sabemos que el bien está vinculado a bendición y que el mal está vinculado a maldición?
Si leemos unos pocos versículos antes, obtenemos la respuesta: "Mira, pues, yo pongo hoy delante de ti la vida y el bien, la muerte y el mal, con el fin de que ames al Señor tu Dios..." Deuteronomio 30:15-16
Así pues, escoger vida es escoger bendición, es ansiar el bien.
Andar por sendero de muerte es maldición, es caer en mal.
Escoge: es una orden, ya no es sólo una sugerencia. Dios nos exige que escojamos, que elijamos los pasos que daremos. Esto es un imperativo que nos obliga a ser responsables, estudiosos, apegados a las Escrituras, cumplidores de mandamientos.
¿Por qué es tan importante escoger entre el bien y el mal?
Pues, porqué es lo que Dios demanda de nosotros. Y, porqué es lo que fundamenta el sistema de justicia perfecta con la cual Dios nos juzga.
Y, porqué es lo que hace que el bien que recibimos de parte de Dios, no nos sea de humillación, y si de deleite.
pues, la vida para que vivas, tú y tus descendientes, amando al Señor tu Dios: la vida no es respirar, comer, beber, dormir, divertirse, reproducirse. Vivir queda definido en la Biblia como "amar a Dios". ¿Cómo se Lo ama? Pues:
escuchando Su voz y siéndoLe fiel: estudiando la Biblia, cumpliendo Sus preceptos, ¡Eso es vivir! Lo otro, (respirar, comer, reproducirse, etc.) es simplemente pasar por la vida.
¿Qué diferencia a un suicida de uno que está de paso por la vida?
Pues, que el suicida ha cerrado toda puerta para su desarrollo espiritual, ha cortado los lazos con la vida, con la bendición, con el bien.
Pero, el que está pasando por la vida sin vivirla (pues no está sirviendo a Dios, tal como Él exige de cada cual), siempre está en la posibilidad de retornar a la senda que Él ha declarado como buena.
Porque Él es tu vida y la prolongación de tus días: el servicio a Dios es la vida para el ser humano, tanto en Este Mundo como en el Venidero.
Existen dos tipos de muerto: uno es el que ha fallecido, que ha dejado de respirar y de interactuar con el mundo. El otro, es el que está apartado de Dios.
El destino no existe ni la predestinación tampoco. (En el sentido de un camino prefijado por el cual necesariamente la persona debe andar, lo quiera o no, lo sepa o no).
Dios no es indeciso, ni mentiroso ni mucho menos humano. Es una IMPOTENCIA para el hombre ESCOGER (lo que Dios le ha proporcionado a los hombres) si tendría un camino a seguir estipulado o de antemano.
¿Qué sentido tiene vivir, si todo es vano y a merced de poderes antojadizos?
¿Acaso seríamos responsables de los actos que hacemos, si no actuamos de acuerdo a nuestra voluntad?
¿Acaso se nos podría instar a ser fieles a Dios cumpliendo Sus mandamientos, si una fuerza misteriosa es la que verdaderamente maneja nuestras vidas?
El mérito y la falla de la persona residen en su capacidad para elegir voluntariamente entre lo que es bueno y lo que no lo es.
Sintetizando:::: pues el ser humano es dueño de su “destino” de su vida. Solamente está sometido a las leyes objetivas (las físicas por ejemplo), por lo cual no todo depende de su voluntad, ni de sus intenciones, pero tampoco de ningún titiritero llamado Destino.
Y la persona que se asimila en su conducta a las bestias, deja en manos de los acontecimientos los rumbos de su existencia.
Así pues, si quiere estar seguro de que no hay un destino pendiendo sobre su cabeza: estudie (lo que tiene permitido de) la Biblia, y practique con fluida constancia los preceptos que el Dios le ha encomendado.
El resto, son meras especulaciones que no conducen a nada positivo.
Dios le Bendiga y le de paz.