Re: $ 1000 dolares para que me pruebe con la biblia que ELENA WHITE es profeta de Di
Estimado Marlon. Saludos cordiales.
Pienso que esta es una gran oportunidad, de presentar a los estudiosos hermanos ya sean adventistas o de otras iglesias, quién era Ellen White, y que comparen nuestra información con la que proveen los detractores. (En ningún momento estoy pidiéndole el premio a valdense), ya que desde un comienzo, le enrrostré su falso juego.
¿Cuáles son las pruebas de un verdadero profeta? La declaración de Noorberger, citada anteriormente, da una lista de diez de esas pruebas. Pero tres pruebas resolverán cualquier problema de este tipo que podamos tener: (1) Condiciones físicas del profeta cuando está en visión; seis señales físicas (listadas más adelante).
(2) Vida personal del profeta, dedicado a Jesús y en obediencia y en armonía con los principios bíblicos.
(3) Los mensajes dados por el profeta tienen que estar en total acuerdo con las normas, promesas, doctrinas y leyes de la Biblia.
A lo largo de los años, este escritor ha escuchado o a observado a muchos "profetas" modernos. Solo en este último año, he visto a varios nuevos. Pero la primera prueba dada anteriormente, es conclusiva inmediatamente. Estas son las evidencias físicas de una persona mientras está en visión. Lea cuidadosamente Daniel 10:8-19. Aquí usted encontrará seis señales físicas: (1) El profeta pierde su fuerza y cae al piso en un profundo sueño.
(2) A pesar del sueño, él escucha una voz que le habla.
(3) En la visión, y a veces en alguna acción física, el profeta se levanta sobre sus manos y rodillas y después sobre sus pies, cuando un ser lo toca. (4) Al comienzo él está mudo; pero cuando sus labios son tocados, entonces puede hablar.
(5) A través de toda la visión él no respira, de ninguna manera. Su respiración cesa completamente.
(6) Se le da fuerza durante la visión. Adicione a esto la señal dada en Números 24:4 que dice que
(7) Durante la visión sus ojos están abiertos.
Es interesante notar que muchas de las visiones que tuvo Ellen fueron en público. De esta manera las pruebas bíblicas pueden ser fácilmente aplicadas. Y realmente así fue. Cuando Dios llama a un profeta, Él le da esa oportunidad, para que las personas puedan comprobar que ese profeta es de Dios. Alguien que dice recibir visiones de Dios y de ser un profeta verdadero, tendrá, por ejemplo, visiones en público algunas veces, de tal manera que los demás puedan ver que durante diez minutos o hasta más de tres horas, él no respiró y no dio ninguna señal de estar respirando. Y a pesar de estar totalmente inconciente de lo que sucede a su alrededor, el que recibe la visión se puede mover fácilmente por la pieza (si es que se levanta y camina), y posee una fuerza sobrehumana mucho mayor que la capacidad de cualquier otra persona que quiera sobrepasarlo.
Así fue en el caso de la pequeña Ellen. Las pruebas que se le hicieron en aquel tiempo, incluyó el cerrarle la boca y las fosas nasales mientras estaba en visión (lo cual podía durar varias horas). Sus movimientos, mientras estaba en visión, eran libres y graciosos mientras hablaba describiendo algo de lo que estaba viendo. Y sin embargo sus gestos no podían ser controlados ni impedidos. Es interesante que, siendo normalmente muy frágil, las visiones nunca agotaron su fuerza o la dejaron enferma. (A veces, ella fue sanada de alguna enfermedad mientras estaba en visión). En los últimos años, después que ya se había desarrollado una confianza acerca de la genuinidad de su llamado, las visiones venían más frecuentemente durante las noches.
Aquí hay otros versículos bíblicos que proveen pruebas para un profeta verdadero. Puede ser muy interesante leerlos: Mateo 7:20; Isaías 8:20; 1 Juan 4:1-3; 1 Tesalonicenses 5:20-21; Deuteronomio 13:1-4; Oseas 12:10, 13; Hebreos 1:1-2; 2 Reyes 22:14-15; Daniel 2:27-28; Deuteronomio 29:29; Amós 3:7; Números 12:6; 2 Pedro 1:21; 1 Pedro 1:10-11; 1 Corintios 14:4; Joel 2:28-30; 2 Crónicas 20:20.
Aquellos que testimoniaron personalmente las visiones, observaron cuidadosamente lo que sucedió. Y se les dio la libertad de observar libremente a Ellen mientras estaba en visión. Algunas veces eran llamados médicos para que hicieran un examen más crítico y profundo. Aquí hay una declaración de la Sra. Martha Amadon, quien testimonió varias visiones:
"Como una de las que la ha observado frecuentemente en visión, conociendo a las personas que normalmente estaban presentes, todos profundamente observantes y creyentes en sus ejercicios, a menudo me asombré de por qué no se dio una descripción más vívida de las escenas que le fueron presentadas.
En visión, sus ojos estaban abiertos. No había respiración, pero habían movimientos graciosos de los hombros, brazos, y manos, expresando lo que ella estaba viendo. Era imposible que alguien pudiera moverle los brazos o las manos. A menudo decía palabras, y algunas veces sentencias que expresaban lo que ella estaba viendo, ya sea del cielo o de la tierra.
"Su primera palabra en visión fue ‘Gloria’, sonando primero cerca y después perdiéndose en la distancia, muy lejos. Esto a veces se repetía … Nunca hubo alguna excitación entre aquellos que estaban presentes durante una visión; nada causaba miedo. Era una escena solemne y quieta, durando a veces una hora…
"Cuando la visión terminaba, y ella perdía de vista esta luz celestial, volviendo una vez más a la tierra, ella exclamaba con un largo suspiro, a medida que respiraba naturalmente de nuevo, ‘O-s-c-u-r-i-d-a-d’. Entonces quedaba débil y sin fuerzas".
Aquí está la descripción de George I. Butler, dada en 1874. Él también, en muchas ocasiones, testimonió las visiones públicas que ella recibió:
"Durante los últimos treinta años estas visiones han sido dadas con mayor o menor frecuencia, y han sido testimoniadas por muchos, y muy a menudo por incrédulos y creyentes. Generalmente, pero no siempre, esto ocurre en la mitad de sinceras sesiones religiosas donde el Espíritu de Dios está especialmente presente…
"El tiempo durante el cual la Sra. White está en esta condición ha variado de 15 minutos hasta 180 minutos. Durante este tiempo el corazón y el pulso continúan latiendo, los ojos están siempre bien abiertos, y parecen estar mirando hacia un objeto distante, y nunca están fijos en ninguna persona o cosa que esté en el cuarto. Siempre están dirigidos hacia arriba. Ellos muestran una expresión agradable. No hay una mirada lúgubre o cualquier semejanza con algún desmayo. La luz más brillante puede ser colocada sorpresivamente cerca de sus ojos, o alguna maniobra como si algo le fuese a golpear los ojos, y nunca ha habido el menor pestañear o cambio en la expresión a causa de eso; y a veces pasan horas y hasta días para que ella salga de esa condición, hasta que recupere su visión natural. Ella ha dicho que le parece que ha vuelto a un mundo oscuro, pero su visión nunca se ha visto herida debido a sus visiones.
"Mientras ella está en visión, su respiración cesa completamente. Nunca salió por su nariz o por su boca algún resto de respiración, cuando ha estado en esta condición. Esto ha sido comprobado por muchos testigos, siendo que entre ellos ha habido médicos con experiencia, y hasta incrédulos en cuanto a las visiones, siendo que en algunas ocasiones se han reunido públicamente con ese propósito. Ha sido comprobado muchas veces al tapársele suavemente la nariz y la boca con la mano, y poniendo un espejo delante de ella, tan cerca, que cualquier escape de respiración podría haber sido detectado. En esta condición ella a menudo habla palabras y sentencias cortas, pero aun así, no escapa nada de respiración. Cuando ella entra en esta condición, no hay ninguna apariencia de desmayo o de mareo, su cara mantiene sus colores naturales, y la sangre circula normalmente. A menudo ella pierde sus fuerzas temporalmente y entonces se reclina o se sienta; pero otras veces se levanta. Ella mueve sus brazos graciosamente, y a menudo su semblante se ilumina radiantemente como si la gloria del cielo descansase sobre ella. Ella está totalmente inconciente de todo lo que está sucediendo a su alrededor, mientras está en visión, no sabiendo nada de lo que se dice y se hace en su presencia. Las personas pueden pellizcar su piel, y hacer cosas que deberían causarle un gran dolor en condiciones normales, y ella no lo notará ni por el más mínimo temblor.
"No hay ninguna mueca desagradable o contorsiones que normalmente efectúan los médiums espiritistas, sino que una calma, dignificada e impresionante, su apariencia le produce al observador reverencia y solemnidad. No hay nada de fanatismo en su apariencia. Cuando ella sale de esta condición, ella habla y escribe de tiempos en tiempos lo que ha visto en visión; y el carácter sobrenatural de estas visiones es visto aun más claramente en lo que ella así revela, que en su apariencia y condición mientras está en visión, porque muchas cosas le han sido reveladas que era imposible que las conociera de ninguna otra manera.
"Circunstancias peculiares en las vidas de los individuos, a los cuales ella nunca había visto antes en la carne, y secretos escondidos del conocimiento de los más cercanos, le han sido revelados, cuando ella no tenía ningún conocimiento personal sobre el asunto, a no ser a través de una visión. A menudo ella ha estado en una audiencia en la cual ella era totalmente desconocida para los individuos que la formaban, cuando ella se ha levantado y ha apuntado a persona tras persona a quienes ella jamás había visto antes, en la carne, y les ha dicho lo que ellos han hecho, y les ha reprobado sus pecados. Yo puedo mencionar muchas otras cosas parecidas, pero el espacio lo prohíbe. Estas cosas pueden ser comprobadas por muchos testimonios, y afirmamos confiadamente que ellas son de un carácter tal, que no pueden ser llevadas a cabo a través de engaño".
A lo largo de los años, muchos médicos la examinaron cuidadosamente mientras estaba en visión. Uno fue el Dr. Brown de Parkville, Michigan, un médico que a su vez era practicante del espiritismo. Al oír a respecto de sus visiones, él declaro confiadamente que las visiones eran espiritas y que si él pudiera examinarla mientras estuviera en visión, él podría comprobarlo, porque él entraría rápidamente en contacto con el "espíritu flotante" que la guiaba, y así él mismo podría controlarla.
Muy luego él tuvo la oportunidad. El 12 de Enero de 1861, Ellen habló en una reunión en Parkville. Cuando estaba terminando, fue tomada en visión. Los presentes mencionaron al Dr. Brown, de tal manera que le fue solicitado que viniera y la examinara. J. N. Loughborough, un testigo que estaba presente, escribió lo siguiente a respecto de lo que allí sucedió:
"Antes que él hubiese completado ni siquiera la mitad del examen, él [el Dr. Brown] se puso mortalmente pálido, y se sacudió como un sauce llorón. El hermano White dijo, ‘¿Informará el doctor su condición? Él respondió, ‘Ella no respira’, y rápidamente se dirigió a la puerta. Aquellos que estaban a la puerta y sabían de su jactancia, dijeron, ‘Vuelva y haga lo que dijo que haría; saque a esa mujer de la visión’. Con gran agitación él tomó la manilla de la puerta, pero no se le permitió abrirla hasta que los que estaban cerca de la puerta le preguntaron, ‘Doctor, ¿qué le está sucediendo?. Él respondió, ‘Solo Dios lo sabe; déjenme salir de esta casa?".
El Dr. Merritt G. Kellog, menciona una experiencia similar que ocurrió en Tyrone, Michigan el 29 de Mayo de 1853:
"La hermana White estaba en visión ya cerca de 20 minutos o tal vez media hora. Al entrar ella en visión, todos los presentes sintieron la presencia y el poder de Dios, y algunos de nosotros realmente sentimos el Espíritu de Dios descansando poderosamente sobre nosotros. Estábamos en oración en una reunión social el Sábado por la mañana cerca de las 9:00 horas. El hermano White, mi padre, y la hermana White habían orado, y yo estaba orando entonces. No había habido ninguna excitación, ningún tipo de demostraciones. Le suplicamos sinceramente a Dios, sin embargo, que bendijera la reunión con Su presencia, y que bendijera la obra en Michigan. Cuando la hermana White dio aquellos gritos triunfantes de ‘¡Gloria! ¡G-l-o-r-i-a! ¡G-l-o-r-i-a! que usted ya ha escuchado cuando ella entra en visión, el hermano White se levantó y le informó a la audiencia que su esposa estaba en visión. Después de declarar la manera de sus visiones, y decir que ella no respiraba mientras estaba en visión, él convidó a cualquiera que quisiera comprobarlo para que pasara adelante y la examinara. El Dr. Drumond, un médico… que (antes de verla en visión) había declarado que sus visiones eran de origen mesmeriano (hipnotismo), y de que él podía darle una visión, fue adelante, y después de un completo examen, se puso muy pálido, y dijo, ‘¡Ella no respira!’.
"Yo estoy muy seguro de que ella no respiraba en aquella época mientras estaba en visión, ni en ninguna otra ocasión en que yo he estado presente. Su salida de la visión era tan marcante como su entrada. La primera indicación que tuvimos de que la visión había terminado, era que ella comenzaba a respirar nuevamente. Ella tomaba su primer aliento profundo, largo, y completo, demostrando así que sus pulmones habían estado completamente vacíos de aire. Después de tomar el primer aliento, pasaban algunos minutos antes que ella tomara el segundo aliento, el cual llenaba los pulmones de la misma manera que lo hacía el primero; después había una pausa de dos minutos, y entonces una tercera inhalación, después de la cual la respiración se volvía normal".
Comentando sus visiones, su esposo, James White dice esto:
"Al salir de una visión, ya sea durante el día o en una pieza bien iluminada durante la noche, todo es completa oscuridad (para ella). Su capacidad para distinguir aun los objetos más brillantes, mantenidos apenas a algunos centímetros de sus ojos, vuelve gradualmente … Ella probablemente ha tenido, durante los últimos 23 años, cerca de 200 visiones. Estas le han sido dadas bajo las más diversas circunstancias, pero siempre manteniendo una maravillosa similitud".
La experiencia de tener visiones nunca debilitó a Ellen. Al contrario, después de cada visión ella tenía más fuerza física y mejor salud.
En diversas ocasiones, mientras estaba en visión, Ellen sostuvo una Biblia en su mano, mientras su brazo estaba extendido, totalmente extendido, hacia fuera del cuerpo. Dos veces, estando en visión, ella sostuvo grandes Biblias abiertas durante largos periodos, en una mano.
"Una experiencia … nos llevó atrás a la primera parte del año 1845, y tenía que ver con la gran Biblia de la familia Harmon que pesaba 8,4 Kg. Una mañana en su propio hogar en Portland, Maine, mientras estaba en visión, Ellen Harmon se subió sobre un escritorio sobre el cual estaba ese gran libro, lo tomó, lo colocó sobre su mano izquierda, y entonces, extendiendo totalmente su brazo, sostuvo ese gran libro durante media hora. Durante la visión, en cortas exclamaciones, ella se refirió al valor de la Palabra de Dios.
"Bajo circunstancias normales ella no era capaz de tomar ese libro, porque su salud era frágil y en aquel tiempo ella pesaba apenas 37 Kg. Ella no estaba fatigada debido a esta experiencia".
La Biblia anteriormente mencionada es guardada en Washington D.C. Este escritor se encontró con la única persona que hasta aquí ha conseguido sostener esa Biblia durante diez minutos, con el brazo extendido. Él era un campeón de levantamiento de pesas. Por lo que me acuerdo, su record fue de 13 minutos. Esto fue en la década de 1950.
En las reuniones Sabáticas, realizadas en Nueva Inglaterra en 1848, fueron dados varios estudios doctrinarios por varios fieles cristianos. En esas reuniones, Ellen fue tomada en visión, cada vez que el grupo llegaba a un punto en que no podían avanzar más en sus análisis, y le daba una solución al problema. Pero en una ocasión en ese verano, ellos finalmente llegaron al punto en que las opiniones eran tan opuestas, que era totalmente imposible avanzar más. Alexander Ross, que estaba presente en esta reunión específica, relató este incidente así:
"La hermana White, mientras estaba en visión, se puso de pie y tomó la Biblia familiar y la puso sobre su mano izquierda; el libro tenía un tamaño normal. Mientras lo sostenía abierto, bien en alto, sin mirar hacia él, con su mano derecha apuntaba texto tras texto, y colocando su dedo en la escritura, repetiría el mismo. Yo miré muchos de los textos, para ver si ella realmente estaba repitiendo el texto que estaba señalando. Yo mismo y varios de los presentes, comprobamos todos los textos. En todos los casos, ella no solo repetía el texto que estaba señalando, sino que ella lo hacía mientras sus ojos estaban mirando hacia arriba y en una dirección opuesta a la de la Biblia. Fueron estos textos bíblicos que ella repitió, los que eliminaron las falsas teorías… en Volney [Nueva York], en Agosto de 1848, e hicieron con que nos unamos alrededor de la verdad".
En la siguiente declaración, Arthur L. White describe la manera en la cual la información que Ellen recibía en visión era escrita:
"1.- Las visiones dadas en público y acompañadas por marcantes fenómenos físicos.
2.- Las visiones dadas durante un periodo de oración o de escritura, sin acompañamiento de fenómenos físicos.
3.- Las visiones dadas durante las tranquilas horas de la noche, que a menudo eran definidas como ‘sueños proféticos’.
‘Algunos han supuesto que en las experiencias de la Sra. White, ella escribió mientras estaba en visión’, dijo él, ‘pero esto no es verdad. Algunos han concluido que cuando ella escribió estaba registrando palabras que le habían sido dichas por un ángel. Esto, también es erróneo, excepto en raras oportunidades, cuando citas cortas y directas eran recibidas por el ángel que la acompañaba.
Algunos han sido de la opinión que existía una fuerza mecánica que guiaba la pluma que ella sostenía en su mano. Ese punto de vista también está totalmente fuera de armonía con los hechos.
"La revelación consistía en la iluminación de la mente, y entonces, cuando no estaba en visión, era el deber del profeta, con la ayuda del Espíritu de Dios, lógicamente, pasar a otras instrucciones, admoniciones e información de origen divino que ella había recibido. En las visiones era cubierta una gran gama de asuntos.
"A veces, los eventos del pasado, del presente y del futuro eran abiertos ante Ellen White de una manera muy dramática, dándole a ella la impresión de que estaba viendo en una rápida sucesión una vívida reescenificación de las escenas de la historia’".
D. T. Bourdeau solucionó el asunto en su propia mente de una manera muy directa y definida. El siguiente incidente sucedió en Buck’s Bridge, Nueva York, en 1857 mientras Ellen estaba en visión:
"El 28 de Junio de 1857 yo vi a la hermana Ellen G. White en visión por primera vez. Yo era un incrédulo con respecto a las visiones; pero una circunstancia entre varias que puedo mencionar, me convenció de que sus visiones eran de Dios. Para satisfacer mi mente en relación a si ella respiraba o no [mientras estaba en visión], yo primero puse mi mano sobre su pecho lo suficientemente lejos como para tener la seguridad de que no había ningún otro peso que el que habría habido si su cuerpo hubiese sido un cadáver. Entonces tomé mi mano y la coloqué sobre su boca, cerrando su nariz entre mi pulgar y el dedo índice, de tal manera que era imposible que ella exhalase o inhalase aire, aun cuando ella desease hacerlo. Yo la sostuve así con mi mano durante unos diez minutos, lo suficiente como para que ella se sofocase en circunstancias normales; ella no fue afectada en lo más mínimo debido a esto. después de haber testimoniado este maravillosos fenómeno, no me he inclinado nunca más a dudar del origen divino de sus visiones".
Mientras estaba en visión, a Ellen White se le daban soluciones para problemas inmediatos, un conocimiento sobre los eventos recientes, y también visiones de cosas que estaban muy en el futuro.
"Como surgen muchas preguntas relacionadas con mi estado mientras estoy en visión, y después de salir de ella, yo diría que cuando el Señor se complace en darme una visión, yo soy llevada a la presencia de Jesús y de los ángeles, y pierdo totalmente de vista las cosas terrenales. Yo no puedo ver nada más que lo que el ángel me muestra. Mi atención es a menudo dirigida a escenas que transcurren en la tierra. A veces soy llevada bien lejos hacia el futuro y se me muestra lo que va a suceder. Y entonces nuevamente se me muestran cosas que han sucedido en el pasado. Después que salgo de la visión, no consigo acordarme inmediatamente de todo lo que he visto, y el asunto no está totalmente ante mí, hasta que lo escribo, entonces la escena surge delante de mí tal como me la fue presentada en la visión, y yo puedo escribir con libertad. Algunas veces, las cosas que he visto permanecen ocultas para mí, luego que salgo de la visión, y no puedo llamarlas a mi mente, hasta que soy llevada a ciertas personas a las cuales se aplica esa visión, entonces las cosas que he visto vienen a mi mente con fuerza".
W. C. White, uno de sus hijos, nos cuenta acerca de una visión que ella tuvo mientras estaba en un grupo de oración en una reunión en Minnesota, en el verano de 1870. Orando sinceramente por guía en relación con ciertos problemas, ella repentinamente se detuvo en su oración cerca de 30-45 segundos, y entonces llegó a una triunfante conclusión a respecto de esa oración, agradeciéndole a Dios por responderle lo que le acababa de preguntar. Ella había sido tomada en visión y se le había mostrado lo que tenía que ser hecho. Luego que la reunión terminó, ella y su esposo fueron al hogar de un vecino amigo y allí ella permaneció cerca de dos semanas, y durante ese tiempo ella escribió todo lo que le había sido informado durante aquella corta visión.
Más adelante aprenderemos acerca de la importante visión sobre salud que recibió en 1863, en Otsego, Michigan, la cual duró 45 minutos, lo cual le proveyó a ella la información necesaria como para escribir varios grandes libros sobre salud, medicina y temperancia. Y consideraremos la visión de dos horas que recibió en Lovett’s Grove, Ohio, en 1858, la cual le permitió ver la historia desconocida de varios siglos, desde antes de la caída de Lucifer, hasta el fin del pecado y aun más allá.
Continuará...