Con el Holocausto a cuestas
El Papa de gira por Tierra Santa con la misión de curar heridas
El Papa Benedicto XVI pasa revista a la guardia de honor que le dio la bienvenida ayer a su llegada al Palacio Real de Ammán.
El País / España
Roma - El papa Benedicto XVI inició ayer el viaje más significativo de su Pontificado al visitar los Santos Lugares, donde recorrerá distintas ciudades de Israel, los territorios palestinos y Jordania.
La visita está marcada por las críticas que vienen de buena parte de la comunidad judía por la influencia en Ratzinger de Pío XII, el Papa que “no intervino” contra el Holocausto según denuncias hebreas, y la reciente polémica del prelado británico Richard Williamson, quien negó el exterminio judío en Alemania.
El Sumo Pontífice aterrizó ayer en Amán, Jordania. En la pista del aerpuerto, esperaban a Benedicto XVI el rey Abdalá II de Jordania, acompañado de su esposa, la reina Rania, así como los patriarcas católicos de Tierra Santa, obispos, cuerpo diplomático y algunos fieles de religión musulmana.
En Jordania existen casi 110,000 católicos, que representan el 2% de la población. El Papa pronunciará 29 discursos en una semana: cuatro serán en territorio palestino, nueve en Jordania y el resto en el Estado de Israel.
En el discurso pronunciado en Ammán, el máximo representante de la Iglesia Católica abogó por “la libertad religiosa y el respeto de los derechos inalienables y la dignidad del hombre, así como por una paz duradera, verdadera y justa para todos los que viven en Oriente Próximo”.
El Papa expresó su respeto por la comunidad musulmana y recordó la iniciativa Mensaje de Ammán, dirigida al mundo musulmán para encontrar un consenso que aleje al extremismo violento, y también el Mensaje Interreligioso de Ammán, que va dirigido a los cristianos y a los judíos para promover la paz y los valores que comparten el Islam y las demás religiones.
También dijo que estas iniciativas han dado buenos resultados favoreciendo una alianza de civilizaciones entre el mundo occidental y el musulmán, desmintiendo las predicciones de aquellos que consideran inevitable la violencia o el conflicto.
“Jordania está en primera línea en la promoción de la paz en Oriente Próximo y en el mundo, anima al diálogo interreligioso y apoya los esfuerzos para encontrar una justa solución al conflicto israel-palestino, acogiendo a los refugiados de Irak e intentando frenar el extremismo”, aseguró.
El Papa de gira por Tierra Santa con la misión de curar heridas
El Papa Benedicto XVI pasa revista a la guardia de honor que le dio la bienvenida ayer a su llegada al Palacio Real de Ammán.
El País / España
Roma - El papa Benedicto XVI inició ayer el viaje más significativo de su Pontificado al visitar los Santos Lugares, donde recorrerá distintas ciudades de Israel, los territorios palestinos y Jordania.
La visita está marcada por las críticas que vienen de buena parte de la comunidad judía por la influencia en Ratzinger de Pío XII, el Papa que “no intervino” contra el Holocausto según denuncias hebreas, y la reciente polémica del prelado británico Richard Williamson, quien negó el exterminio judío en Alemania.
El Sumo Pontífice aterrizó ayer en Amán, Jordania. En la pista del aerpuerto, esperaban a Benedicto XVI el rey Abdalá II de Jordania, acompañado de su esposa, la reina Rania, así como los patriarcas católicos de Tierra Santa, obispos, cuerpo diplomático y algunos fieles de religión musulmana.
En Jordania existen casi 110,000 católicos, que representan el 2% de la población. El Papa pronunciará 29 discursos en una semana: cuatro serán en territorio palestino, nueve en Jordania y el resto en el Estado de Israel.
En el discurso pronunciado en Ammán, el máximo representante de la Iglesia Católica abogó por “la libertad religiosa y el respeto de los derechos inalienables y la dignidad del hombre, así como por una paz duradera, verdadera y justa para todos los que viven en Oriente Próximo”.
El Papa expresó su respeto por la comunidad musulmana y recordó la iniciativa Mensaje de Ammán, dirigida al mundo musulmán para encontrar un consenso que aleje al extremismo violento, y también el Mensaje Interreligioso de Ammán, que va dirigido a los cristianos y a los judíos para promover la paz y los valores que comparten el Islam y las demás religiones.
También dijo que estas iniciativas han dado buenos resultados favoreciendo una alianza de civilizaciones entre el mundo occidental y el musulmán, desmintiendo las predicciones de aquellos que consideran inevitable la violencia o el conflicto.
“Jordania está en primera línea en la promoción de la paz en Oriente Próximo y en el mundo, anima al diálogo interreligioso y apoya los esfuerzos para encontrar una justa solución al conflicto israel-palestino, acogiendo a los refugiados de Irak e intentando frenar el extremismo”, aseguró.