Que el amor de Dios, de la bienaventurada Virgen María y de todos los santos esté con todos los cristianos.
Leyendo aquí en el foro vi que varios posteadores han mencionado que uno que se congrega con la secta de los adventistas tiene un dibujo identificador de un hombre barbudo ataviado a la usanza de lo que un pintor imaginó que era el traje del sumo sacerdote, y ese hombre barbudo está delante de una imagen de lo que puede haber sido el Arca de la Alianza que el Señor nuestro Dios mandó hacer. Según dijo otro que se congrega con la secta de los adventistas, el hombre barbudo así disfrazado es nuestro Señor Jesucristo, ataviado con un sumo sacerdote aarónico.
Lamentablemente para la secta de los adventistas, ninguno de los santos apóstoles de nuestro Señor, ni el bienaventurado San Juan en el Apocalipsis, describieron que Jesús llevara esos atavíos. Quien sí lo hizo fue Ellen White. En su libro “Primeros Escritos” escribió esta cosa:
“Después de eso, un carro de nubes, cuyas ruedas eran como llamas de fuego, llegó rodeado de ángeles, adonde estaba Jesús. El entró en el carro y fue llevado al lugar santísimo, donde el Padre estaba sentado. Allí contemplé a Jesús, el gran Sumo sacerdote, de pie delante del Padre. En la orla de su vestidura había una campana y una granada; luego otra campana y otra granada” (página 55).
En otros lugares dice cosas parecidas.
Eso que cuenta Ellen White de esos ropajes, con lo de las campanas y las granadas está basado en dos pasajes de la Biblia. Según la traducción de la Santa Biblia del R.P. Serafín de Ausejo, Moisés recibió estas instrucciones sobre el efod, una de las vestiduras (de color azul) de Aarón: “Adornarás el borde inferior del manto con granadas de púrpura violeta y escarlata y de carmesí; entre las que colocarás, todo alrededor, campanillas de oro. Campanillas de oro y granadas se alternarán: campanilla de oro y granada, campanilla de oro y granada, así por todo el borde inferior del manto” (Éxodo 28.33, 34).
Y, más tarde, Moisés cuenta cómo se ejecutaron las instrucciones divinas: “La orla inferior del manto se adornó con granadas de púrpura violeta y escarlata de carmesí y de lino fino torzal. Hicieron campanillas de oro puro y las colocaron entre las granadas alternando con ellas, en el borde inferior del manto, todo en derredor. En todo el borde inferior del manto con que se había de oficiar alternaban una campanilla y una granada, una campanilla y una granada, como lo había ordenado Yahveh a Moisés” (Éxodo 39.24-26).
O sea, que un atuendo del efod azul de Aarón tenía adornos de campanillas y granadas.
Pero hay un problema en lo que dice Ellen White de su “visión”. Aarón no entraba con ese atuendo al lugar santísimo, porque la Santa Biblia especifica que las campanillas y las granadas estaban en el efod de Aarón, de color azul, que llevaba a diario como parte de su atuendo, pero en el Día de las Expiaciones, que era el único día en el que el sumo sacerdote pasaba al lugar santísimo, la Biblia es muy clara que tenía que quitarse su ropa normal y ponerse otra especial que solo llevaba ese día. Antes de poder empezar las ceremonias especiales de ese día, el sumo sacerdote tenía que prepararse:
“Vestirá la túnica sagrada de lino, llevará calzones de lino, se ceñirá un cinturón de lino y se cubrirá con un turbante también de lino. Éstas son las vestiduras sagradas con que se vestirá después de haberse lavado” (Levítico 16.4).
Después de que la congregación despedía el chivo expiatorio, se hacía lo siguiente:
“Luego entrará Aarón en la Tienda de Reunión y, despojándose de las vestiduras de lino con que se había vestido al entrar en el santuario, las dejará allí; lavará su cuerpo con agua en lugar sagrado y se pondrá sus vestiduras. Después saldrá y ofrecerá su holocausto y ofrecerá su holocausto y el holocausto del pueblo, hará la expiación por sí mismo y por el pueblo” (Levítico 16.23, 24, BJ).
Entonces, vemos que Aarón no llevaba puesto un efod azul (su atavío habitual) cuando entraba en el lugar santísimo una vez al año, sino una túnica especial de lino (tejido blancuzco) que solo se usaba para esa ceremonia del Día de las Expiaciones. Según la Biblia, Aarón no llevaba granadas ni campanas al lugar santísimo cuando entraba en él. Entonces, cuando Ellen White dice que vio en el lugar santísimo a Jesús, que no era descendiente de Aarón ni de Leví, con las vestiduras normales que tenía Aarón fuera de la ceremonia del lugar santísimo, ¿qué es lo que vio esa mujer? ¿No dicen en la secta adventista que lo terrenal era símbolo detallado de lo celestial? ¿Aarón se dejaba el efod azul (el de las campanas y las granadas) para ponerse la túnica sagrada de lino, pero Jesús no? ¿Por qué habría de ponerse Jesús las vestiduras de diario de Aarón, si él no es sacerdote según el orden de Aarón?
“Ahora bien, si se obtuviera la perfección por el sacerdocio levítico, porque en él se basaban las leyes dadas al pueblo, ¿qué necesidad habría de que surgiera un sacerdote distinto, según el rito de Melquisedec, y no según el rito de Aarón?” (Hebreos 7.11, SA).
¿Quizá Ellen tuvo una alucinación de algún diablo y, como apenas conocía la Biblia, no se dio cuenta de la impostura?
Parece que Ellen White volvió a dar la campanada con lo de la granada.
Que el amor de Dios, de la bienaventurada Virgen María y de todos los santos esté con todos los cristianos.
Leyendo aquí en el foro vi que varios posteadores han mencionado que uno que se congrega con la secta de los adventistas tiene un dibujo identificador de un hombre barbudo ataviado a la usanza de lo que un pintor imaginó que era el traje del sumo sacerdote, y ese hombre barbudo está delante de una imagen de lo que puede haber sido el Arca de la Alianza que el Señor nuestro Dios mandó hacer. Según dijo otro que se congrega con la secta de los adventistas, el hombre barbudo así disfrazado es nuestro Señor Jesucristo, ataviado con un sumo sacerdote aarónico.
Lamentablemente para la secta de los adventistas, ninguno de los santos apóstoles de nuestro Señor, ni el bienaventurado San Juan en el Apocalipsis, describieron que Jesús llevara esos atavíos. Quien sí lo hizo fue Ellen White. En su libro “Primeros Escritos” escribió esta cosa:
“Después de eso, un carro de nubes, cuyas ruedas eran como llamas de fuego, llegó rodeado de ángeles, adonde estaba Jesús. El entró en el carro y fue llevado al lugar santísimo, donde el Padre estaba sentado. Allí contemplé a Jesús, el gran Sumo sacerdote, de pie delante del Padre. En la orla de su vestidura había una campana y una granada; luego otra campana y otra granada” (página 55).
En otros lugares dice cosas parecidas.
Eso que cuenta Ellen White de esos ropajes, con lo de las campanas y las granadas está basado en dos pasajes de la Biblia. Según la traducción de la Santa Biblia del R.P. Serafín de Ausejo, Moisés recibió estas instrucciones sobre el efod, una de las vestiduras (de color azul) de Aarón: “Adornarás el borde inferior del manto con granadas de púrpura violeta y escarlata y de carmesí; entre las que colocarás, todo alrededor, campanillas de oro. Campanillas de oro y granadas se alternarán: campanilla de oro y granada, campanilla de oro y granada, así por todo el borde inferior del manto” (Éxodo 28.33, 34).
Y, más tarde, Moisés cuenta cómo se ejecutaron las instrucciones divinas: “La orla inferior del manto se adornó con granadas de púrpura violeta y escarlata de carmesí y de lino fino torzal. Hicieron campanillas de oro puro y las colocaron entre las granadas alternando con ellas, en el borde inferior del manto, todo en derredor. En todo el borde inferior del manto con que se había de oficiar alternaban una campanilla y una granada, una campanilla y una granada, como lo había ordenado Yahveh a Moisés” (Éxodo 39.24-26).
O sea, que un atuendo del efod azul de Aarón tenía adornos de campanillas y granadas.
Pero hay un problema en lo que dice Ellen White de su “visión”. Aarón no entraba con ese atuendo al lugar santísimo, porque la Santa Biblia especifica que las campanillas y las granadas estaban en el efod de Aarón, de color azul, que llevaba a diario como parte de su atuendo, pero en el Día de las Expiaciones, que era el único día en el que el sumo sacerdote pasaba al lugar santísimo, la Biblia es muy clara que tenía que quitarse su ropa normal y ponerse otra especial que solo llevaba ese día. Antes de poder empezar las ceremonias especiales de ese día, el sumo sacerdote tenía que prepararse:
“Vestirá la túnica sagrada de lino, llevará calzones de lino, se ceñirá un cinturón de lino y se cubrirá con un turbante también de lino. Éstas son las vestiduras sagradas con que se vestirá después de haberse lavado” (Levítico 16.4).
Después de que la congregación despedía el chivo expiatorio, se hacía lo siguiente:
“Luego entrará Aarón en la Tienda de Reunión y, despojándose de las vestiduras de lino con que se había vestido al entrar en el santuario, las dejará allí; lavará su cuerpo con agua en lugar sagrado y se pondrá sus vestiduras. Después saldrá y ofrecerá su holocausto y ofrecerá su holocausto y el holocausto del pueblo, hará la expiación por sí mismo y por el pueblo” (Levítico 16.23, 24, BJ).
Entonces, vemos que Aarón no llevaba puesto un efod azul (su atavío habitual) cuando entraba en el lugar santísimo una vez al año, sino una túnica especial de lino (tejido blancuzco) que solo se usaba para esa ceremonia del Día de las Expiaciones. Según la Biblia, Aarón no llevaba granadas ni campanas al lugar santísimo cuando entraba en él. Entonces, cuando Ellen White dice que vio en el lugar santísimo a Jesús, que no era descendiente de Aarón ni de Leví, con las vestiduras normales que tenía Aarón fuera de la ceremonia del lugar santísimo, ¿qué es lo que vio esa mujer? ¿No dicen en la secta adventista que lo terrenal era símbolo detallado de lo celestial? ¿Aarón se dejaba el efod azul (el de las campanas y las granadas) para ponerse la túnica sagrada de lino, pero Jesús no? ¿Por qué habría de ponerse Jesús las vestiduras de diario de Aarón, si él no es sacerdote según el orden de Aarón?
“Ahora bien, si se obtuviera la perfección por el sacerdocio levítico, porque en él se basaban las leyes dadas al pueblo, ¿qué necesidad habría de que surgiera un sacerdote distinto, según el rito de Melquisedec, y no según el rito de Aarón?” (Hebreos 7.11, SA).
¿Quizá Ellen tuvo una alucinación de algún diablo y, como apenas conocía la Biblia, no se dio cuenta de la impostura?
Parece que Ellen White volvió a dar la campanada con lo de la granada.
Que el amor de Dios, de la bienaventurada Virgen María y de todos los santos esté con todos los cristianos.