Que la paz del Señor sea con todos ustedes:
Estos días, leyendo, escudriñando, y prestando más atención a todo cuanto acontece a la Iglesia Católica (romana), a la verdad y por la gracia de Dios, considero que ha llegado el momento de darle un total voto de confianza. No a la institución y en si mismo, sino a la membresía y en general que forma parte de ellos.
De entre ellos son los muchos los que muestran un verdadero interés por las cosas de Dios, por crecer en conocimiento de su Palabra, y por sobre todo, es de admirar el ver al hablar con ellos cara a cara, en una pausada y amistosa conversación; los ves realmente interesados en recibir y tomar todo cuanto del Evangelio les hablemos, y a su vez, compartir todos sus debidos razonamientos, inquietudes, y por sobre todo, ganas de que las cosas cambien ya y en muchos aspectos.
Nos hemos dejado llevar –al menos así en mi lo veo– muchas veces por lo que nos han dicho, hemos oído, otros comentan, y para mal mayor, por lo que el mundo erradamente dice en base a un total desconocimiento... pero a la verdad, nada tiene que ver con el sentir verdadero de los muchos católicos que cada día más voy conociendo. Es muy gratificante hablar con ellos cara a cara, muy gratificante, y Dios es testigo.
Los tiempos cambian, nosotros y por la gracia de Dios vamos creciendo por su gracia, y vamos viendo que donde antes todo lo veíamos negro –o peor aun, blanco–, a la verdad hoy lo podemos ver totalmente contrario, y donde parecía que no, hoy es una clara esperanza, donde parecia que sí, hoy es un gran error.
Es tiempo de empezar a mostrar y en verdad que entendemos esta Enseñanza de Jesucristo el Señor: quien esté libre de culpa que tire la primera piedra. Y por mi parte NO, NO PUEDO.
Claro está que muchos son los que andan por estos foros diciendo ser católicos, pero a la verdad son los causantes de que muchos terminen mal entendiendo.
Pero también verdad que en estos foros participan, y han participado verdaderos católicos muy honestos, muy sencillos, y llenos del Espíritu Santo.
Hoy, mi voto es totalmente para con estos últimos, que son los que en verdad manifiestan y muestra verdaderamente el que hoy es el sentir de este grupo tan numeroso, y cada vez más creciente dentro del catolicismo romano.
Pero bueno, como no se que reacción pueden causar estas mis palabras, de momento lo dejo aquí y esperaré a ver que pasa. Eso sí, a los que participasen que tratasen de hacerme ver –y hacerlos ver– com podemos ayudarnos los unos a los otros.
Que la gracia de nuestro Señor Jesucristo, el amor del Padre y la comunión del Espíritu Santo esté con todos vosotros.
Estos días, leyendo, escudriñando, y prestando más atención a todo cuanto acontece a la Iglesia Católica (romana), a la verdad y por la gracia de Dios, considero que ha llegado el momento de darle un total voto de confianza. No a la institución y en si mismo, sino a la membresía y en general que forma parte de ellos.
De entre ellos son los muchos los que muestran un verdadero interés por las cosas de Dios, por crecer en conocimiento de su Palabra, y por sobre todo, es de admirar el ver al hablar con ellos cara a cara, en una pausada y amistosa conversación; los ves realmente interesados en recibir y tomar todo cuanto del Evangelio les hablemos, y a su vez, compartir todos sus debidos razonamientos, inquietudes, y por sobre todo, ganas de que las cosas cambien ya y en muchos aspectos.
Nos hemos dejado llevar –al menos así en mi lo veo– muchas veces por lo que nos han dicho, hemos oído, otros comentan, y para mal mayor, por lo que el mundo erradamente dice en base a un total desconocimiento... pero a la verdad, nada tiene que ver con el sentir verdadero de los muchos católicos que cada día más voy conociendo. Es muy gratificante hablar con ellos cara a cara, muy gratificante, y Dios es testigo.
Los tiempos cambian, nosotros y por la gracia de Dios vamos creciendo por su gracia, y vamos viendo que donde antes todo lo veíamos negro –o peor aun, blanco–, a la verdad hoy lo podemos ver totalmente contrario, y donde parecía que no, hoy es una clara esperanza, donde parecia que sí, hoy es un gran error.
Es tiempo de empezar a mostrar y en verdad que entendemos esta Enseñanza de Jesucristo el Señor: quien esté libre de culpa que tire la primera piedra. Y por mi parte NO, NO PUEDO.
Claro está que muchos son los que andan por estos foros diciendo ser católicos, pero a la verdad son los causantes de que muchos terminen mal entendiendo.
Pero también verdad que en estos foros participan, y han participado verdaderos católicos muy honestos, muy sencillos, y llenos del Espíritu Santo.
Hoy, mi voto es totalmente para con estos últimos, que son los que en verdad manifiestan y muestra verdaderamente el que hoy es el sentir de este grupo tan numeroso, y cada vez más creciente dentro del catolicismo romano.
Pero bueno, como no se que reacción pueden causar estas mis palabras, de momento lo dejo aquí y esperaré a ver que pasa. Eso sí, a los que participasen que tratasen de hacerme ver –y hacerlos ver– com podemos ayudarnos los unos a los otros.
Que la gracia de nuestro Señor Jesucristo, el amor del Padre y la comunión del Espíritu Santo esté con todos vosotros.