Re: El Centro White le responde a Billy Vicente
Vaya, vives en la Nueva Jerusalén, donde no hay más llanto, ¿te extirpate las glándulas lacrimales?. ¿Ya no mueres? Eres más mortal que un gusanito. Por cierto, esa ciudad tuya es "chimba", de mala calidad, porque se dice que en la tierra renovada no va a ver mar, y mira como hay todavía.
Les sale santorio mental (manicomio) urgente.
Je, je, je. Se ve que del evangelio sabes poco, infeliz. Jesús enseñó que quien cree en él, aunque esté muerto, vivirá. La Nueva Jerusalén, infeliz, es la esposa del Cordero, ¿no? Eso leo yo en Apoc. 21:2. ¿Y no es la iglesia la esposa del Cordero, inepto? Apocalipsis 19:7, 8 afirma que la esposa del Cordero se ha ataviado con lino fino, y aclara que el lino fino representa los actos justos de los santos. Y Pablo enseña que los maridos deben amar a sus esposas como Cristo amó a la iglesia para presentársela a sí mismo santa e inmaculada. ¡Oh, tu ansiada ciudad física se te acaba de arruinar, infeliz!
En cuanto al mar, pobrecito, no es lo único que se dice que no hay allí. Se dice, por ejemplo, que no hay noche (Apoc. 21:25). Fatalmente, si no hay noche, los días no pasan en ella, de modo que resulta MATERIALMENTE IMPOSIBLE GUARDAR EL SÁBADO. Tus idiotas y pérfidos argumentos se contestan así, pequeñuelo, sin contemplaciones de ningún género para tipos de tu calaña, chiquitín. Fíjate, farsante infeliz, en lo que enseña el comentario "bíblico" de tu pestilente secta: "Here John simply affirms that the heavens, the earth and the seas will no longer exist AS WE KNOW THEM NOW" (tomo 7, p. 889). ¿Has visto, infeliz? Ni siquiera tu inmundo comentario bíblico osa asegurar que en el mundo de la Nueva Jerusalén no hay mar, sino que se trata de un mar "distinto" del conocido en los tiempos en que se escribió el Apocalipsis. En realidad, inepto, con su terminología del cielo nuevo, la tierra nueva y el mar que ya no era, Juan está aludiendo a un conocido pasaje de Isaías, que afirma:
"Empero yo Jehová, que parto la mar, y suenan sus ondas, soy tu Dios, cuyo nombre es Jehová de los ejércitos. Y en tu boca he puesto mis palabras, y con la sombra de mi mano te cubrí, para que plantase los cielos y fundase la tierra, y que dijese á Sión: Pueblo mío eres tú." (Isa. 51:15-16).
El pasaje ya fue explicado en el siglo XVII por John Owen, teólogo Puritano en el sentido de que Isaías evoca la creación de la nación de Israel con el incidente del éxodo (referencia a la partición del mar). Y Dios "planta" los cielos en el éxodo creando orden, gobierno y belleza donde antes había caos y confusión. Y "funda" la tierra creando una nueva sociedad: la nación de Israel.
Es natural que quienes se fían de una falsa "luz menor" se pierdan las joyas de la "Luz mayor". Dios plantó un nuevo cielo en el momento del éxodo, fundó una nueva tierra en ese mismo momento y partió el mar. Cristo ha creado cielos nuevos y tierra nueva y ha partido el mar con la cruz, en un nuevo éxodo con el que se ha creado la iglesia. Eso es lo que dice Juan, infeliz.